Un susurro aterrorizado

55 8 0
                                    

Y vi esa sangre goteando en una cuchilla, vi esos brazos mojados de gotas rojo carmesí, marcados de cicatrices. No, me negué, era imposible que esas fueran tus muñecas y esa tu sangre, era totalmente imposible.

Me sonreíste y bajaste lentamente tus mangas.

Cogiste la cuchilla y la pusiste sobre la parte de piel que quedaba sin tapar, apretaste moviendo con suavidad la hoja, sabiendo lo que hacías. Empezó a sangrar, más sangre junta de la que yo había visto nunca, gotas y gotas cayendo al suelo todas en un solo instante. Tu sonrisa imborrable y tu mano aún apretando la cuchilla contra las venas mientras se cerraban tus ojos. Caíste en mis brazos y aterrorizado por lo que pasaría después susurré:

-¿Qué has hecho?...

Un susurro másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora