Bandana

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Al fin, el día tan esperado por Alfas, Betas y Omegas había llegado.

El inicio de los regionales polideportivos.

El lugar estaba repleto de gente de distintas escuelas y equipos de la ciudad, desde futbolistas hasta nadadores corrían de un lado a otro ya sea calentando o arreglando los últimos detalles antes de empezar con la jornada.

Entre todo el bullicio y ajetreo, Seungmin estiraba buscando con una sonrisa a cierto castaño de cabello rizado.

El pelirrojo, al igual que sus hermanos y Christopher, competiría ese día con el equipo de animadoras de su escuela, siendo el Omega capitán de este.

Estiró sus brazos hacia su espalda para luego acomodar pulcramente la falda roja con negro de su uniforme, que se complementaba con el crop top sin mangas con los colores de la institución y con la bonita cinta que decoraba el cuello del ojigris.

Sip, Kim Seungmin era simplemente precioso y eso era algo que todos sabían.

El bonito Omega sonrió al divisar al equipo de atletismo ingresar al recinto, y sus mejillas tomaron un adorable tono carmín al ver al guapo alfa de ojos azules con el uniforme deportivo que se pegaba a su gran y fuerte cuerpo y que, al ser sin mangas, dejaba a la vista sus fuertes y marcados brazos.

Seungmin sentía que se iba a desmayar por lo guapo que se veía Christopher de atleta.

Fue a buscar su bolso a paso rápido y sacó de este una pequeña bolsa color verde pastel con un trozo de papel crepé decorándola y tapando lo que había dentro de esta.

Arrugó un poquito el papel para darle de nuevo esa forma esponjosa que le había dado para luego sonreír y dirigirse hacia el grupo de atletismo.

Por su parte, Christopher estaba estresadísimo tratando de encontrar su bandana de capitán, el entrenador se la había entregado hace apenas unos días (el mismo día en que le dió el título) con orgullo y felicitándolo por lo responsable y gran líder que era.

Y ahí estaba, el "responsable" alfa buscando su bandana.

Había llamado a casa preguntando si estaba allá, pero sus padres como siempre no estaban y su hermano Félix había dado vuelta la habitación del rizado buscando la famosa bandana, sin tener éxito en absoluto.

"Mierda, y ahora qué le digo al señor Jeon?" Suspiró con pesadez y decidió rendirse, tomó su botella de agua y se dirigió con el resto de sus compañeros.

—¿La encontraste?— Christopher negó, a lo que su amigo pelinegro comenzó a reír— carajo, no te duró ni dos días Bang, cómo puedes ser tan descuidado?

—Cierra la boca, quieres?— Hyunjin rió y el ojiazul golpeó su hombro molesto— la busqué por todos lados, e incluso Lix la buscó en casa pero la muy maldita no- — Su berrinche se vió interrumpido por un dulce aroma a tulipán ingresando a sus fosas nasales, haciendo que su lobo (y todos sus malditos compañeros de equipo) voltearan a ver el origen del aroma.

Christopher casi podía escuchar a los hormonales lobos de sus amigos gruñir y babear al ver al ojigris con el bonito traje de las animadoras marcando sus bonitas y prominentes curvas, además de la cinta negra en su cuello resaltando el tono pálido de este.

Y sabía que los otros alfas estaban así porque su propio lobo estaba a nada de saltar sobre el menor y comérselo enterito.

Seungmin conectó su mirada con la del alfa rizado y se sonrojó sonriéndole al mayor, el Omega era bastante extrovertido y sumamente alegre, pero cuando se trataba de Christopher no podía evitar ponerse un poco tímido.

El mayor lo traía muy enamorado, de verdad que sí.

—Hola, Chris Hyung— Todos murieron de ternura al ver al pelirrojo sonriendo con timidez— y-yo solo quería desearle suerte en la carrera, oh y quería darle esto— Extendió su bracito con la bolsa en mano— sé que no es la misma que el entrenador Jungkook le dió, pero la hice con mucho amor para usted, espero que le guste mucho muchito.

El castaño tomó la bolsa un poco confundido por lo último y abrió el paquete, metiendo su gran mano en este y quedando realmente sorprendido al ver su contenido.

Una elegante bandana color negro con dos franjas rojas en los bordes reposaba en su mano,era de tela suave y al desdoblarla su lobo dió saltitos alegres al ver que tenía bordado finamente en color rojo las iniciales de su nombre y una bonita luna creciente.

Sin darse cuenta, el aroma a chocolate amargo del alfa se comenzó a intensificar, dejando ver que el chico estaba, de hecho, feliz por el regalo que el menor le había dado.

Los chicos del equipo, incluyendo a Hyunjin, estaban totalmente asombrados por la reacción de Christopher puesto que, en los años que llevaban conociendo al rizado, sólo lo habían visto sonreír cuando ganaban alguna carrera, y eran sonrisas a labios cerrados y realmente chiquitas.

Nada comparado a la enorme sonrisa que había en su rostro, dejando ver dos bonitos hoyuelos en sus mejillas que nadie sabía que el mayor tenía.

—Muchas gracias— Seungmin abrió sus ojitos realmente sorprendido y los alfas comenzaron a chillar y gritar emocionados— es realmente bonita, me encanta, muchas gracias Seungmin— El ojiazul llevó sus orbes al rostro del pelirrojo y se asustó al ver lágrimas en sus ojitos.

Sin embargo, toda preocupación se convirtió en nervios y en latidos acelerados al sentir los delgados bracitos del Omega rodeando su cintura mientras este liberaba su aroma lleno de felicidad.

"El puto paraíso" ronroneó su lobo y las orejas del alfa se enrojecieron furiosamente.

—ME HACE MUY FELIZ, CHRIS HYUNGIE!— Se separó del mayor y comenzó a aplaudir dando saltitos emocionado, haciendo que su faldita rebote levemente sobre su redondo trasero, atrayendo las miradas hambrientas de los alfas hacia él— le va a ir genial, yo lo sé, LO VOY A ESTAR ANIMANDO TODO EL TIEMPO!— Puso sus manitos en los hombros de Christopher y, parándose de puntitas, besó suavemente la mejilla del Alfa— mucha suerte, Alfa~.

Y si, tal vez el corazón del castaño estaba por estallar de lo rápido que iba y su lobo no paraba de revolcarse y aullar emocionado en su interior.

Vió al Omega alejarse de a poco hasta que se quedó de pie unos segundos, luego volteó a verlo aún con los ojos cristalizados y esa enorme sonrisa en su precioso rostro.

—FIGHTING, HYUNGIE!— El pelirrojo alzó su brazo y lo agitó despidiéndose del mayor enérgicamente, cosa que lo hizo sonreír avergonzado y devolver el saludo tímidamente.

Sin embargo esa sonrisa se borró cuando notó que en la muñeca y antebrazo de Seungmin había manchas oscuras apenas visibles, como si fueran moretones cubriendo toda la zona.

"¿Pero qué carajo?"

 Hiiii, revivimos STM!! Lamento la inactividad pero prometomás rápido (MEM ya viene ok?tengan paciencia)

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Smile to me (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora