Seduciendo a la Novia de mi Ex || FreenBecky [Completed]

Capítulo 15

"¿Qué crees que estás haciendo?" preguntó, su voz llena de sorpresa.

Di un paso atrás, sintiendo cómo mis mejillas se enrojecían de vergüenza. ¿Cómo no me había dado cuenta de que todavía estaba despierta?

"Lo estás haciendo todo mal", dijo Freen, colocándose encima de mí. Sus ojos estaban cargados de somnolencia mientras me miraba. Se acercó para un beso pero se apartó bruscamente cuando nuestros labios se tocaron.

Se quedó dormida. Está bien, vamos a descansar también.

***

Los días pasaron volando y Freen y yo nos acercamos. Cuando salíamos tarde, a menudo me acompañaba a casa. Empecé a unirme a ella en reuniones fuera de la oficina y parecía que no podía apartar sus ojos de mí.

Incluso por la noche, Freen me llamaba para preguntarme cómo había sido mi día, a pesar de pasar todo el día juntos.

Desde ese beso, Freen había cambiado. Ya no era la estricta CEO que me regañaba por llegar puntual al trabajo o exigía café a gritos. El desarrollo del personaje de Freen era increíble.

Sin embargo, no podía saber si mi plan estaba avanzando. Freen se volvió amigable no solo conmigo, sino con todos en la oficina. No podía averiguar si ya le gustaba yo o si simplemente había cambiado.

Esta mañana, decidí sorprender a Freen con una taza de café antes de que entrara a la oficina. Mientras tomaba la taza, frunció el ceño y comprobó si todavía estaba caliente.

"Lo preparé hace solo dos minutos", dije.

Freen sonrió con suficiencia, apoyándose contra la pared. Me miró y luego prestó atención al café.

"¿Le pusiste una poción de amor?" preguntó.

Me reí y negué con la cabeza, acercándome lentamente a ella. "¿Todavía necesito una poción de amor?" pregunté juguetonamente, mordiendo su nariz.

Freen se sorprendió por mi acción.

Hoy quería descubrir si tenía un efecto en Freen. Necesitaba saber si le gustaba yo o si simplemente era amable con todos.

Freen me empujó contra la pared, mirándome con intensidad a los ojos. Dicen que los ojos no mienten, y podía ver a través de los ojos de Freen si estaba contenta, triste o agotada. Podía discernir fácilmente sus pensamientos a través de su mirada expresiva. Sin embargo, hoy era diferente. No podía descifrar lo que quería decir. Sus ojos transmitían algo que no podía comprender.

"¿Cómo te atreves a morderme la nariz así?" preguntó Freen, cerrando lentamente la brecha entre nuestros rostros.

Nuestras narices se tocaron y pude sentir su cálida respiración. Sonreí ligeramente, encontrando su mirada. Nuestra posición era incómoda para ella, ya que era más alta que yo, pero no parecía importarle. Estaba demasiado ocupada mirando mis labios, mordiéndose los suyos.

"¿Solo vas a mirar?" pregunté en un tono ronco. "¿Por qué no te acercas?"

Los ojos de Freen se centraron en mí y sonrió lentamente.

"¿Recuerdas la pregunta que me hiciste antes? Si había aprovechado a alguien antes", preguntó. "¿Y si lo hice? ¿No tienes miedo?"

Me reí de sus palabras, apartando lentamente a Freen y dándole la espalda, sintiendo cómo mis mejillas se calentaban. Tal vez este era el efecto de sentirse culpable al aprovecharse de alguien.

¿Por qué me excita su voz? Debería ser yo quien coquetee con ella, ¿pero por qué está coqueteando ella también? Maldición.

"¿A dónde vas?" preguntó Freen, agarrando mi brazo. Colocó su otra mano en mi mandíbula, mirando nuevamente mis labios.

"Voy a la despensa. Tengo hambre, señorita", respondí, apartando sus manos de mí.

Me reí de su expresión y salí de la oficina. Tan pronto como abrí la puerta, choqué con alguien, y él me escrutinó de arriba abajo antes de entrar casualmente a la oficina.

"Becky", me llamó Chompoo, así que me acerqué a ella. "Él es el presidente de la Empresa de Construcción Chankimha. Es el padre de la señorita Chankimha."

"Oh", murmuré. "Parece intimidante."

"Es realmente estricto y perfeccionista. La próxima vez que te encuentres con él, simplemente evita el contacto visual. De lo contrario, podrías ser despedida", advirtió Chompoo, y asentí.

Tenía curiosidad por escuchar su conversación, pero no me parecía correcto. Me preguntaba de qué estaban hablando. ¿Le estaba regañando de nuevo? Había estado haciendo un buen trabajo últimamente, y esperaba que no arruinara su estado de ánimo hoy.