¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
JASMINE.
Me despierto aturdida en un lugar que no conozco, con dolor de cabeza, los ojos me arden de una manera que no puedo describir. Me maldigo internamente cuando me doy cuenta que hay alguien al lado mío y mucho más cuando no recuerdo lo que pasó anoche.
Estoy envuelta con las sábanas de la cama. Tocó mi cuerpo para verificar si tenía ropa puesta y me relajó cuando notó que si. Seguía teniendo el mismo vestido, menos los tacones. Me estiró para ver quien carajo es la persona que estaba al lado mío y suspiro aliviada cuando veo que es la espalda de Jaida.
Lo primero que hago es tomar mi teléfono que estaba en algún lado de la cama, una vez que lo encuentro deslizó mi pantalla de bloqueo y comienzo a ver las miles y miles de llamadas de Salomón.
Discutimos cuando fuimos a cenar, al parecer no le sirvieron las dos semanas para reconocer sus errores. Y la verdad, me encontraba tan cansada de la misma mierda que si venía lo iba a terminar perdonando como siempre.
Entre todas esas llamadas también veo mensajes, unos que me llaman la atención de itsyoungmiko, en Instagram, claro. Ella no tenía mi número.
Sin más abro sus mensajes, que fueron enviados a partir de las 08:30 de la mañana, indicándome su ida hace un par de horas.
@itsyoungmiko quiere enviarte un mensaje: heyy, como estas?.⁰⁸'³⁰
Aceptó la solicitud, pero no le contestó. Más bien, intentó levantarme sin hacer ruido ya que Jaida me mataría si la despierto, porque según ella - Era muy temprano levantarse a esta hora.
Veo a Gabriela en el living y lo primero que hago en la sala en contraerme y cerrar mis ojos por el gran destello de luz que entraba por los ventanales del espacio.
Después de un intercambio de palabras con mi amiga, decidí irme por fin de ahí. Además el dolor de cabeza por el alcohol que había ingerido anoche. Que no quería saber cuanto era, pero sabía que había sido un montón. Me estaba matando y lo único que quería en este momento, era volver al hotel y tirarme a la cama.
Ya a esta altura eran casi las 14:00 PM.
Me voy, pero también me voy con la mente en otro lado. No paraba de pensar en la cena tan horrible que tuve con el. No podía culpar a nadie más que a mi, yo era la huevona que le acepté la cena. Tal vez si me quedaba con Victoria la hubiese pasado mejor. Por lo menos ella era agradable y era mejor una " amiga ", antes que un baboso.
Lo primero que hice al llegar es darme una ducha para luego acostarme sin más y eso que todavía era muy temprano, aún así mi cuerpo no daba más del cansancio.
