la calidez de tu semblante

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La felicidad inundaba mi ser
Que no pude evitar escapar hacia la ventana
Quería gritar de aquella dicha que de mis adentros se me escapaba
Estaba encantada de  que tú estuvieses ahi  en esos instantes que te tuve. A mi lado

Tan solo tenía 11 años
Pero sabía cuando el amor era el amor
Como lo veía en tus ojos y
Como me
Contagiabas cada ves que tu mirada se posaba junto a ala mía
La euforia contenida era difícil de guardar en ese corazón que ilusionado solo quería proferirle a la orbe lo que le había pasado
Todos podrían saber ese secreto tuyo muy bien guardado de la implicada
Más no de la orne en que te rodeabas
Y ellos te delataban
Tanto  tus ojos como tu corazón

Vianey y tu amigos
Me decían ese secreto a voces
Atreves de sus miradas

Como escapar ante tal mirada
Como escapar del
Set que enamoró mi alma
No puedo hasta el día d hoy
Poruqe aún sigo encantada por esa tu mirada

Aquella que me dejaba saber tu verdadero secreto que se intuía era eterno
Hoy no podré asegurarlo
Pero en ese entonces
Parecía marchar en viento en popa
Ese amor secreto de ambos
Que no dejaban que el uno ni el otro de diesen por enterados

no podría gritar
tenía que contenerMe
No podría dejarle ver a él y a nadie mismo de los entrometidos que me estaban abordando aparentemente sin sentido

Mientras limpiaba mi taza y tiraba el agua hacia el vacío

Los árboles podrían inhibir la sonrisa que se dibujaba cada ves que a colación mi mente trajera esos pequeños recuerdos  que unos instantes en que habían transcurrido me habían dejado tan encantada de haberme dejado conocerlo u poco más
De lo
Que ya sabía se desprendía de su ser a cada instante en que me atrapaba y que la escuela que ya no le encontraba sentido
Se había vuelto ante mis pensamientos algo aparentemente
Más amena.

Había gente paseando en ese pasillo que casi nadie transitaba
cuando me decidí a tirar el agua de mi taza
con aquella forma tal peculiar de la sirenita que combinaría años después con mi cepillo dental también con la imagen de  la sirenita
Ariel

Antes de que me se dieran cuenta de que podría haberlos empapado ante el sin cuidado por estar en mi ensoñación lejos de la realidad que no percate al tirar aquella agua desde aquel piso
el ser que había desde aquella altura el agua tirado tendría que huir

Huía de la escena del crimen
Antes de que me acusaran
Antes de que vieran el rostro
De la persona que no tenía cuidado alguno
Para evitar que alguein se mojara
Me aleje lo más rápido que me dieron más las fuerzas  hasta llegar nuevamente  a mi asiento

Y me quede sentada
Meditando en lo que habría de decirles  a aquellas personas que llegarían a reclamarme
Por mi falta de educación o de entereza por la sociedad

Y no es que no estuviese en ese momento consciente
Es que la sensación que tenía en ese instante me embarcaba en un vaivén de emociones que no me dejaban volver a mi estado natural
Y quería saber si aquello era algo real o tendría que ser sumado a otro de mis sueños
Arroje el agua pensando en que si escuchase su sonido el sueño tal ves era vivido

Sabiendo que era un pasillo poco transitable
Y sin miedo alguno Me aventuré a lo
Impensable
Aquello que estaría lejos de poder realizar adrede lo había llevado a cabo

Parecía que gozaban de no tomar clases y
De  que los maestros no llegasen
Era la libértad en su máxima expresión
El estar fuera de clases
Tener las hormonas alborotadas
Decían algunos
Tener la certeza de que puedes hacer lo que te plazca pues no hay padres en el proceso vigilándote
Atrás de ti
O regañándote como siempre había  sido el caso de Nuestra compañera Vianey
Si existía en este mundo una madre violentamente en extremo esa era la madre de Vianey
Hasta nosotras le temíamos cuando la regañaba en público y llegaba por sus calificaciones

La chica intachable: Peter Donde viven las historias. Descúbrelo ahora