2087, en una ciudad futurista
Cada mañana al despertar, abro mis ojos y veo por mi ventana un sol anaranjado y radiante que poco a poco ilumina mi cuarto. En ese momento escucho a alguien llamandome... su voz dulce se apartaba cada vez más, era extraño.
"Levántate, levántate, la gente te necesita y tú las necesitas a ellas"
¡Ahhhh! - grite mientras me levantaba de la cama en un instante.
¿Qué demonios fue eso? Jamás había tenido un sueño tan raro y sobre todo con una chica diciendome algo asi, de todos modos no creo que sea algo importante. Mientras me agarro la cabeza miro mi ventana con el sol dandome una calurosa bienvenida, agarro mi polo que estaba a los pies de la cama y luego de ponermelo, escuche esos pasitos bonitos acercandose a mí.
Jajaja- Si era mi buen amigo Kopper.
Mi primer amigo desde que tengo memoria, siempre se subía a mi cama para lamerme la cara mientras movía su cola rápidamente. Me encantaba eso de él, aunque luego tenia que lavarme la cara.
Luego de cambiarme me dirigí a mi cocina y prepare el desayuno para mi como para Kopper. Mientras lo hacia escuche al otro lado de la pared a dos personas hablando mientras reian un poco, creo que era el vecino de arriba que siempre regresa de fiestas junto con su novia, de veras que no tienen respeto por los demas, por suerte mi pareja y yo somos más decentes.
Hay, a quien engaño, como tendría pareja alguien como yo, apenas tengo 18 años. En esa edad mucha gente tenía su primera enamorada ¿no? Sobre todo en la escuela. Pero no es mi caso y creo que jamás lo será. En fin, no se porque pienso en esas cosas.
Luego de tomar mi desayuno, deje las cosas en mi lavatorio y comence a vestir mi ropa de entrenamiento, que solo trataba de mi casaca negra, mi mochila ya lista con agua, toallas y un cuaderno y obviamente mis auriculares, sino el camino se hace aburrido.
Después de que mi celular cargara al 100%, note un mensaje de mi jefe diciendome.
"Karven(K) ya estamos todos, te esperamos"
Suspire. Abri la ventana de mi departamento y coloque un pie en ella, antes de irme tenia que despedirme de mi amigo claro- Ya vuelvo Kopper, ya sabes como son los lunes, hay que entrenar.
Luego de eso, coloque mi otro pie sobre la ventana y di un salto, en donde puedo ver toda mi bella ciudad llamada Kardolis. Y me encanta siempre verla desde mi ventana, pero algo mejor que eso es recorrer sus grandes calles y antes de que se asusten, yo hago Parkour por lo que descuiden estoy bien.
Caí encima de un edificio, di un y segui corriendo mientras tarareaba la letra de mi cancion. Segui corriendo y saltando entre las terrazas de los edificios hasta que llego a bajar por unas escaleras hasta llegar a la vereda y unos
Justo al frente estaba la tienda de Don José, asi que como siempre voy a ahi a comprar algo de provisión, ya saben unas cuantas golosinas y un refresco.
Don Jose es un buen amigo mio, es un adulto mayor que atendía una pequeña tienda con su esposa la señora Marta, cuando me acerqué ellos inmediatamente me reconocieron y me saludaron.
Ah, Karven, hijo ¿como estas? - dijo Don José al verme entrar.
K: Bien Don, deme este refresco helado y unas papas fritas porfavor- dije, mientras sacaba mis monedas
Aqui tienes hijo- dijo la señora Marta con mi pedido en la mano.
K: Gracias, señora Marta, cuidense.

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Karven el justiciero misterioso
AdventureKarven pertenece a un pequeño grupo de amigos, de los cuales la pasaria momentos divertidos y muy entretenidos con ellos, eso hasta que se daria cuenta de que estos tomarian un rumbo que el ya no podia seguir.