ANGELA Y DEMONY

Conociendose

Demony caminaba tranquilo por los pasillos de una casa humana, con cuidado de no encontrarse con el perro de la familia, ya que los animales son los únicos que pueden ver a los demonios sin que ellos se lo permitan.

— Donde estará ese estúpido saco de pulgas — susurró mientras caminaba por el pasillo — como odio que me asignen casas humanas — se quejaba constantemente.

Continuó caminando buscando al animal al que debía inmovilizar para poder comenzar a robar cosas o apagar luces. A menudo se encontraba por la casa a algunos de los miembros de la familia haciendo tareas domésticas o simplemente viendo la televisión cómodamente sentados en el sillón, había visto varias veces al perro aunque por suerte el perro a Demony no, pero siempre estaba acompañado de alguno de los humanos, y sería muy extraño y sospechoso ver a tu perro volar y hacer cosas raras en medio de una sala, por lo que debía pillarle solo. Demony vió las patas traseras del perro dar la vuelta en la esquina del pasillo y al no escuchar ninguna voz pensó que estaba solo por lo que se emocionó y comenzó a correr para alcanzarle, pero al girar en la esquina se chocó contra... ¿Alguién? Imposible, los demonio atraviesan a los humanos, pero cuando abrió los ojos se dió cuenta de que no era exactamente un humano.

— ¿Quéeeee? — Demony levantó la cabeza y se dió cuenta de que era un ángel — p-pe-pero en qué momento me toca ya — se quejó — pero si no he cumplido los 1180.

— Si los has cumplido — le contestó el ángel — los cumpliste exactamente hace un  minuto y treinta y dos segundos — le indicó con orgullo — asique supongo que felicidades — le dijo con una sonrisa — me presentó, me llamo Ángela y soy tu ángel guardián.

— ¿Enserio, Ángela, qué pasa, tus padres no te quieren? — se burló él.

— Te recuerdo que el nombre de los ángeles no lo eligen sus padres — le corrigió — además, por lo menos yo tengo padres.

— Alaaa — respondió el demonio haciéndose el sorprendido — se supone que los ángeles soy buenas personas y esas cosas, osea a mi me parecen gilipolleces pero que mal ángel e — le hecho en cara —

— Si no fuese un buen ángel no me abrían asignado un demonio —

— Espera espera, entonces yo soy un buen demonio — dijo el con orgullo — pues claro, si soy el más malvado de todos algún  día seré rey de los demonios y destruire el planeta muajajjaja —

— No — le dijo cortante Ángela —

— ¿Que no que? - pregunto curioso el demonio —

— Pues, que el hecho de que tengas un ángel guardián no quiere decir que seas un buen demonio — le explicó — todos los demonios tienen un ángel guardián, y de hecho tu eres de los más palurdos —

— Perdonaaa — se ofendió — yo pa-pal-pa-palurdooo tu si que eres una palurda ángel de pacotilla — la insulto a gritos — cuando sea rey de los demonios ordenare que te decapiten mujajajjaja —

— ¿Tu? Rey de los demonios, sigue soñando, si no matas ni a una mosca demonio inútil no te tengo miedo, podría dejarte inválido con un solo dedo — le amenazó —

— Eee relaja la raja que si no la caca no baja, si con un dedo no te sacas ni un moco seco —

— Pero si no sabes ni insultar guarro - le dijo ella con asco — además nos vamos ya que como nos pille el perro la liamos — le ordenó —

— Nonono yo sin hechar mis maldiciones no me voy e — le contradijo —

— Como no te muevas te voy a dar yo a ti maldiciones —

— Que pesada  le reprocho el pelirrojo —

Y tras un largo viaje hasta el Gran Torrente, una gran plataforma exagonal elevada sobre el cielo rodeada por una capa de nubes que dan la sensación de cubrir la plataforma como paredes. El Gran Torrente es la unica conexión entre el mundo humano, el de los Ángeles y el de los demonios,  la plataforma contenía tres Portales a la izquierda el de Incineriott el Reino de los demonios, con una espiral rojiza producida por la magia de teletransporte y a la derecha el portal a Casteldem el Reino de los Ángeles con  la espiral en color azul y en el medio un gran portal tres o cuatro veces más grande que los de sus lados con la espiral en color blanco, en el cual hay... Bueno en realidad hay muchas teorías pero nadie sabe que hay realmente pero existen muchas teorías, le llaman el portal de Monsteliatus y la entrada esta completamente prohibida por el consejo. Tras el largo viaje Angela y demoni llegaron juntos aunque demoni tuviese que hacerlo a regañadientes.

— Haaa ya estamos — suspiro el Ángel con alivio — Jajaja nuestra forma de conocernos a sido bastante graciosa —

— Si que divertido no — le contestó con ironía —

— Que amargado eres —

— No soy amargado, pero yo tengo un buen humor no como ootras — le reprocho el demonio —

— Si claro — le respondió con desdén la peli blanca —

— Bueno yo me piro a casa — le contestó el ignorando el comentario del Ángel —

— Sera lo mejor porque los bebés necesitáis dormir mucho — se burló ella — adiós Demony —

— Adi- espera ¿¡COMO ME HAS LLAMADO!?-— se pico el demonio mientras entraba en su portal—

— Jajajaja — reaccionó ella por último mientras desaparecía en el portal —

Y así paso el primer día de Angela y demony, pero esto no acaba así porque juntos pasarán unas cuantas eternidades más.