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Se oían carcajadas, todo era un caos en la limusina. Los siete chicos celebraban después de otro concierto exitoso, hace dos meses habían estrenado varias canciones, todas exitosas, así que eran más famosos que nunca. Hacían bromas, se reían, jugaban, todo lo que hacen los chicos de dieciocho.

Afuera llovía a cántaros, parecía que el cielo se iba a caer. Habían muy pocas personas en las calles en ese momento, puesto que era muy tarde. Al llegar a su residencia ellos se irían a dormir directamente para descansar. Se calmaron un poco y decidieron jugar. Dirían todo lo que veían por turnos.

Habían bebidas por todo el carro, algunas ya tomadas y otras esperadas por ser abiertas. Algunos, para mantenerse seremos, solo comían golosinas como si fueran niños para guardar y alargar el momento.

── veo un árbol sin hojas ──anuncio uno a los otros seis

── ¿Un árbol sin hojas? ──pregunto el de su costado antes de empezar a reírse descontroladamente.

── ¿Que tomó Jake? ──pregunto el del otro lado

── Cerveza, Jungwon ──aviso un rubio

Algunos ayudaron a acostar al muchacho ebrio y otros continuaban jugando. Siguieron diciendo todo lo que veian

── Veo un carro rojo

── Veo un edificio blanco

── Veo un gato negro

── Veo una.. ──se quedo callado antes de abrir los ojos, atónito. ── ¡Deten el auto! ──Grito justo en un semáforo rojo

El vehículo freno repentinamente, haciendo jadear a todos. Solo Dios sabe de donde saco una sombrilla y salió corriendo del auto, todos se le quedaron viendo

── ¡Niki! ──grito un peli negro

── ¡Traiganme una casaca o algo para taparla! ──pidio a gritos el rubio.

Uno de ellos, Jay, corrió para brindarle su casaca negra con fin de tapar a la pequeña persona frente suyo. Mientras intentaban hacer eso, la figura se tambaleo y callo en seco frente suyo, asustandolos.

El rubio la tomo en brazos, preocupado, y la cargo al estilo nupcial para introducirse con ella en el carro, al igual que Jay. Con cuidado, empezó a acomodarle sus cabellos mojados para ver bien su cara y secarla levemente. Era una chica, de cabellos negros que le llegaban más abajo de los hombros y tenía su piel bronceada. Todos los presentes soltaron un jadeo, tenía algunas heridas en sus brazos y piernas, solo llevaba un camisón y unos shorts, parecía que se había desmayado.

Todos miraron al rubio con la chica en brazos.

── ¿Quien es ella?

(. . .)

Ya habían llegado a su departamento, no sabían que hacer. En la desesperación, habían llamado a una amiga suya para que bañara a la niña y la cambiará, ya que ellos eran hombre y se podia resfriar.

Los pasos de la chica entrando nuevamente a la sala principal cayó a todos, la miraron con expresión curiosa combinada con preocupación.

── ¿Como esta la niña ──pregunto un peli negro sentado al costado del rubio

La chica les sonrió y se apoyo en la pared con los brazos cruzados.

── Tranquilos, ya está bien, no se va a enfermar ──aclaro al ver la cara asustada de todos para calmarlos ── chicos...

Todos le prestaron atención absoluta, el tema era serio y tenían que tomarlo como tal.

── tiene... ──cayó momentáneamente antes de cerrar los ojos── tiene heridas... y moretones, muchos moretones...

𝐄𝐍𝐇𝐘𝐏𝐄𝐍 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora