𝐵𝑖𝑏𝑙𝑖𝑜𝑡𝑒𝑐𝑎| ʳᵘˢᵍᵉʳ

𝑮𝒆𝒓𝒎𝒂𝒏𝒚 𝑰𝑰𝑰

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[5:57.A.M. lunes]

Aunque no quisiera me dirigí a la escuela, le tenía que regresar el celular a Japón, ya que, como pensó que se iría me lo dió para platicar con Rusia. al llegar a la escuela ya adentro escuché murmullos, y fui de chismoso, me haceruqe más y era Rusia platicando con su novia, y antes de moverme más hice ruido un poco de ruido, sentí como me tapaban la boca y me agarraron, ya después susurro -calla que yo también quiero ver el chisme- era chile, que iba en primero de prepa, y estaba acompañado con argentina y Perú, estos solo rieron en silencio, y seguimos escuchando

-¿¡Cómo te pude explicar si te marchaste justo cuando nos viste!?.

-ya te dije américa, no trates de arreglar las cosas, tu y yo sabemos que te acostaste con mi hermano.

Todos se taparon la boca, en un gesto de sorprendido, yo por mi parte me empecé a sentir mal por escuchar los problemas de los demás. Y seguimos escuchando.

-YA, y tu me dijiste que te acostaste justo tres días después con alguien.

-por que te deje en claro que ya no éramos nada... Ya lo sabía desde principio, pensé que lo ibas a decir...

La chica suspiro, chile me dejó y me pasó para atrás donde estaba argentina para ver un poco, hizo una expresión de sorprendido.

-anda Russia... Tu y yo ya nos engañamos, ya sabemos cómo lidiar con esto por si llega ha pasar de nuevo...

Hubo un silencio y chile, metió su poca cara que tenía para ver con una expresión asustada y dijo susurrando -wueon.... Creo que me vio Rusia....- Perú salió corriendo asiendo demasiado ruido, -ERES UN...- grito argentina, pero le tape la boca, el me agarró y jalo y yo jale a chile, y nos echamos a correr, llegamos a dónde Perú estaba, básicamente en el patio de la prepa, -¡¿sos pelotudo o que?!, Casi nos descubren por la culpa de chile y vos- yo me queje bajo, me empezó a doler un poco mis caderas, y procedí a sentar -de todas maneras ya había visto a chile, a ese tal Rusia no se le pasa nada!- Estaban pelando y echándose la culpa, mire a la derecha y estaba Rusia con su novia o ex, -CÁLLENSE- me miraron los tres -los van a escuchar- miraron a la dirección en dónde se encontraban, y yo me golpe la frente con mi palma, -sean un poco simulados ¿No?- Perú se echó a correr otra vez porque se dirigían hacia nosotros, -hag... No actúen nervioso, de todas maneras no creo que les puedan meter algo por ser chismoso- ellos me miraron y negaron la cabeza, -vámonos de todas maneras- intenté parar pero no puede -y a vos que le pasa he?- yo negué con la cabeza -no puedo levantar aah- chile se hacerco y trato de cargar, algo que no pudo y Argentina se dirigió a mi rápido y me cargo como princesa, -corramos que ya se vienen para acá- chile empezó a correr y Argentina también, chile comento algo -antes de que me viera Rusia la chica le intento besar jajaja-, senti un punzón en mi corazón pero lo ignore, aparte me sentía avergüenzado por ser una carga -perdon- argentina calmo su risa y me sonrió sin mirarme -no se preocupe, no pesas mucho- yo reí, llegamos a su salón y me ayudaron a bajar, -seguro que te encuentras bien?- yo asentí -si, no se preocupen, yo iré a mi salón- me despedí y me diriji a mi salon, suspiré y me senté en mi lugar, pero senti que se olvidaba algo, mire a mis lados y no ví nada -mierda mi mochila!- saque mis llaves y corrí, ignorando el poco dolor que venía y se iba, llegue al estacionamiento y mire que se encontraban Rusia y la chica discutiendo de nuevo, se encontraban cerca de mi moto, suspiré me arme de valor y me fui a mi moto, saque mis llaves y senti sus miradas y el silencio repentino hizo el ambiente tenzo, saque mi mochila y me la puse, pesaba, y lo quise disimular, apreté mis labios aguantado un grito, suspiré y camine un paso y dejé de caminar, entonces caminaba poco ha poco, y llegue a mi destino, me senté cansado y adolorido, no habían tantos compañeros pero no me importo, sentí que bribro el celular de Japón le mire y decía un comunicado "grupo I °3 cancelamos las clases, una disculpa por las molestias bla bla" y más, escuché los quejidos que mis compañeros, que se pararon y salían, yo me acosté en mi mesa, -tanto para nada- suspiré.