El alba iba rayando. Tonalidades rojizas y anaranjadas iban pintando el horizonte ,dándole una fabulosa bienvenida ah un nuevo día,una nueva mañana.
Los primeros rayos matutinos se colaban por las rendijas,cortinas y huecos,alumbrando y refrescando desde la chosa más pequeña hasta la mansión más aristócrata,pues la mañana no hace distinciones.
Ni siquiera para una joven de 17 años que dormitaba en la parada del camión,esperando el inicio del horario laboral.
Sus sueños eran un remolino de emociones,aquella escena se repetía de manera incansable,como un CD rayado. La encarnizada pelea que había librado con su madre fue lo único que necesito para cansarse y abandonar su hogar,¿Su destino?,tampoco era claro para ella. De pronto entre su arremolinado sueño apareció su rostro....aquellos mechones morados tintiniaban en su hipotálamo,esa mirada café se impregnada entre sus neuronas.
¡Claro!,ella le podría apoyar.
Apesar de Aver acabado su relación amorosa seguían siendo buenas amigas,pese aber cortado la comunicación por un par de meses.
Dieron las 7 am,el primer camión inicio su viaje y con él el inicio de su destino.
Su casa quedaba a no más de una hora pero el trayecto se sintió eterno. Las palabras se rebovinaban ,los "hubiera" abundaban ,sin embargo...el hubiera no existe.
¡Al fin llegó!,y sus esperanzas se desmoronaron....
Frente a ella una señora de 40 años con un rostro ya tan conocido. La mujer lucía Ojerosa , agobiada. La inchason en sus ojos delataba las horas que había pasado llorando.
Luego de intercambiar unas cuantas palabras con la mujer,entendio su estado.
Aquel que había sido su primer amor había seguido sus pasos aun que con diferentes tiempos: Una fuerte discusión,gritos,llanto,mucho orgullo y Mila también se había ido de su casa.
¿Es que acaso la vida estaba empeñada en cerrarle sus oportunidades?,¿Por qué no había acudido a ella?, acaso .....no sentían esa confianza. Al parecer no,no era mutua.
Ese pensamiento le quebró el alma, pues muy en el fondo aún había cierto amor por ella,de igual forma....unilateral.
No quiso consternar a la adulta delante de ella,así que se excuso diciéndole que estaba ahí por qué habían quedado,algo habitual en ellas. Ese lugar había sido como un segundo hogar.
Le obsequio una sonrisa a la mujer y se retiró de ahí,justo cuando el portón daba sus últimos chirridos para cerrarse oyó un ladrido. Lucy.
No acababa de comprender ,¿Que tan intensa fue la riña que ella se había marchado dejando atrás a su amado perro?
En estos momentos le preocupaba más ella que su propia situación.
