Min jihoon, un chico que no sigue las reglas y hace las cosas a su manera, y siempre se mete en problemas un chico caprichoso con solo tronar sus dedos tiene todo lo que quiere; quiere entrar a la organización de su familia pero uno de sus padre no...
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- Si no mueves tu trasero té irás caminando al colegio-decía jihoon bajando las escaleras mientras acomodaba su mochila-
Típico de hermano pelear hasta por el aire que respiran, aunque si alguno tuviera que dar la Vida por el otro sin duda los dos se protegerían, estudiaban en el mismo colegio desde cuando eran unos bebés, dentro del recinto llevaban una vida un poco bajo perfil intentaban no usar el apellido de su padre por seguridad, muchas cosas al cumplir la mayoría de edad empezaron a tomar sentido, no solo eran los dueños de grandes empresas si no que sus padres eran los líderes de la Mafia más importante de Corea del Sur y de algunas partes del mundo, ni sus mejores amigos sabían quienes eran sus padres, sabían que eran de dinero pero más de allí no.
Muchas personas intentaban amigar solo por recibir algún beneficio a cambio y jihoon odiaba ese tipo de persona y por eso él era como era frío y distante pero a él si le gustaba alardear de ciertas cosas, Jongho era todo lo contrario woozi vivía defendiéndole de todos no le gustaba buscar problemas con nadie y su círculo de amistad era pequeño.
-Dios son las siete de la mañana y ya estás gritando como niña-nunca despierten a Jongho a gritos porque conocerán el apellido min- cien millones de camionetas tenemos a nuestra disposición vete si quieres, no me gustan que me apuren -bufa-
Los hermanos entraron a la cocina para desayunar la rica comida que les había preparado woosung y al entrar estaban sus padres también en el comedor mirándolos serios, jihoon se tensó un poco en su lugar a sus padres no le gustaba que se trataran de esa manera así que de seguro recibirían un regaño los dos por esos buenos días.
-Buenos días ¡Omma! ¡Appa!-saludaron los gemelos con una reverencia ellos solo le devolvieron un asentimiento de cabeza-
-tomen asiento, se les enfriará el desayuno-les habla yoongi señalando la dos sillas a un costado de el- ¿puedo hacerles una pregunta?
-Si-responde Jongho rápidamente-
-¿podemos alguna vez empezar la mañana con él pies derecho? Porque la verdad que ni nosotros-se señala el y a jimin- ni los empleados queremos despertar con sus gritos irritantes
-si, si Jongho fuera más responsable con el horario
-nadie está obligando a nadie a llevarse al colegio... para eso tenemos chofer-rueda los ojos mientras le da un mordisco a su tostada-
-Pero por seguridad deben irse juntos y venir juntos-esta vez intervino jimin- no me gusta que se peleen por cosas sin sentido, jihoon esperaras y llevarás a tu hermano y tu Jongho deja de ser tan amargado...lo único que siempre le hemos pedido como padre es responsabilidad con sus deberes escolares
-esta bien ¡omma!-se disculparon y los cuatros terminaron de comer como una familia feliz
Los gemelos se prepararon con sus mochilas y uniformes, woozi tomó las llaves de la camioneta que le asignó su padre para ir al colegio, se despidieron con un beso a cada uno que ya era costumbre y salieron al estacionamiento jihoon tomó el asiento de piloto y Jongho de copiloto y por orden de jimin detrás de ellos iban dos escoltas en un auto diferente su padre era muy sobre protector yoongi era un poco más tranquilo pero igual de preocupado aunque no lo demostrara, woozi arrancó el auto y colocó música a todo volumen y si Jongho debía sorportar eso de lunes a viernes y todos los meses del año.
