Iguro últimamente se ha sentido solo; con todos sus compañeros pilares con pareja, se siente excluido de las reuniones, el también necesita tener una...
Pero Giyuu, qué también está solo, no podía ser una opción, lo odiaba.
Mitsuri le recomienda ace...
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──Iguro-san, ¿sabes cómo volverte amigo de Tomioka-san, no?
Es una buena pregunta.
Obanai al principio no supo responderla, por lo que estuvo nervioso por unos momentos, aunque, Kaburamaru, se enroscó en sus hombros de una forma en específico que siempre lograba calmarlo.
Quedaron un tiempo en silencio, y antes de que Mitsuri se sintiera ofendida e ignorada, Obanai finalmente habló:
──No realmente.
En sí no sabía muy bien hacer amigos.
Había sido amigo de Sanemi porque el odio que le tenían a Giyuu fue lo que los unió. Y después se dieron cuenta de que tenían varias cosas en común.
Es un poco gracioso porque ahora está esforzándose en pensar cómo ser amigo de Giyuu. No realmente porque quiera, lo está haciendo para que Mitsuri no esté triste.
Y bueno, hablando de Mitsuri, se había vuelto amigo de ella dándole unos calcetines largos para que no se sintiera tan incómoda con su uniforme. Pero si tuviera que aplicar el mismo truco en Giyuu, le explotaría la cabeza, ¿qué se supone que debería regalarle?
──¡No te preocupes, Iguro-san! Te ayudaré.
Bueno, ahí estaba Mitsuri para apoyarlo también.
Al final, fueron a la finca del amor para discutir ese tema.
♡♡♡
Mitsuri estaba realmente emocionada.
Aunque Obanai no lo supiera, Mitsuri tenía la certeza de que pronto surgiría un nuevo amor, ¡Obanai y Giyuu!
Mitsuri los veía cómo la pareja perfecta, sabía que fácilmente se ayudarían en temas de personalidad y que lo que necesitaban eran conversaciones reales, pero por ahora, solo le dijo a Obanai que tratará de ser amigo de Giyuu.
Luego tendrá tiempo para contarle a los demás sus nuevos emparejamientos. Invitaría a Gyomei a tomar té para contarle uno de los tantos chismes que tenía.
Llevó los panqueques con miel hacía la mesa en donde hablaría con Obanai, también le ofreció un poco de panqueques a él, pero solo respondió con un: "no te preocupes, come tú."
Dejo el plato en la pequeña y baja mesa de madera, Obanai frente a ella con las piernas cruzadas, le sonrió agradablemente y se sentó de rodillas.
──De acuerdo, Iguro-san. ¡Desde hoy ten en cuenta que estaré presente cuando necesites ayuda para acercarte a Tomioka-san! ──Habló Mitsuri animada, Obanai asintió en respuesta y fue lo que le permitió continuar──. Muy bien. Ahora, recordemos que Tomioka-san es alguien cerrado, por lo que será un poco difícil, ¡pero no es imposible!
