Capítulo 01

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POV VERÓNICA

-No puedes terminar conmigo Verónica. -y ahí estaba de nuevo Matías diciendo que no lo podía dejar, ya me estaba hartando un poco la situación que me estaba por volver loca.

-Si puedo hacerlo Matías, estoy cansada de ti, siempre es lo mismo contigo, siempre me dices que necesitas algo mejor, que yo solo te utilizo para cumplir mis caprichos. -le digo parada frente a la puerta de mi habitación.

-Desde hoy terminamos, no quiero saber nada de ti, tampoco de tus cosas, ya tienes el camino libre para poder hacer de tu vida lo que quieras y sin necesidad de estar atado a mí. -le digo lo más calmada posible porque ya me estaba hartando la situación.

-Ok, por mi puedes irte al mismísimo carajo si así lo quieres, haz de tu perra vida lo que quieras que yo tampoco quiero saber nada de ti, ni de tu nombre ni de tus cosas, vete al carajo. -escucho que dice y se levanta de la cama donde va hacia mí, me hace a un lado y cierra lo más fuerte que puede la puerta.

Al escuchar el motor de su auto me acuesto en la cama y me pongo a llorar, no lo hacía porque me termino, lo hacía porque en tres años de relación me ha manipulado a su antojo, donde ya no era amor, donde solo estábamos juntos por el sexo, donde él me veía como su objeto sexual y yo era sumisa a sus peticiones.

Me tiro en la cama y me pongo a llorar, siempre me he sentido menos a su lado, siempre he querido ser más para él, pero eso nunca lo ha visto, siempre me ha hecho sentir una mierda cuando estábamos solos y con mi familia me hacía sentir como la princesa de un cuento.

Apago el teléfono porque no quería saber nada de nadie, donde solo quería dedicarme un tiempo para mi sola.
De tanto llorar solo me coloco mejor en la cama y me acuesto a dormir, mañana debía de madrugar para ir a la universidad.
A la mañana siguiente me voy al baño, veo mi cara y estaba sumamente peor que las otras veces, me entro a bañar, una vez que le agua tibia toca mi cuerpo me sentí más relajada, me quedo unos minutos y luego salgo, busco la mejor ropa que tengo, nadie debe de saber que he terminado con el novio ideal que he deseado siempre.

Al ya estar lista con un poco de maquillaje para borrar todo rastro de lágrimas y cara totalmente demacrada, bajo y me voy a la cocina, solo estaban mis hermanos, mis padres han salido de madrugada a un viaje de negocios.

Agradecí internamente que ya no estuvieran o me harían miles de preguntas que no iba poder aguantar.

-Vamos chicos que les debo de dejar en la escuela y yo irme a la universidad. -les digo y veo como el más pequeño va al baño de abajo a lavarse los dientes.

-Anda tú también cochino debes de lavarte los dientes. -le digo a Cristopher y me hace un gesto negando, pero sale corriendo de mi vista.

Tengo dos hermanos, hay veces que son un caos, que necesitan que estén al pendiente de ellos, Cris por suerte ya no era una molestia ya era bastante grande tenía dieciséis años, Samuel era el más pequeño de cinco años, todo el tiempo lo tenían que controlar porque si no te salía con una travesura era con otra.

Ya listos vamos al coche y cada uno se pone sus cinturones, por suerte tenía la ventaja que iban en la misma escuela y luego yo me iba a la universidad directamente.

Al llegar bajo rápido del coche y bajo a samuel conmigo en brazos, le doy a su maestra y entran juntos, Cris solo entra directo a su salón.

Subo de nuevo al coche y voy a la universidad, por suerte llegue cinco minutos antes de la hora.

Al llegar bajo y saludo a mis amigos, Pascal y Ana. Eran mis mejores amigos desde que he empezado la universidad, siempre han estado ahí para mí, han odiado a Matías desde que le dije que éramos novios, a Pascal no le gusto para nada y Ana pues tampoco le caía demasiado bien por así decirlo.
-Hola a la mujer más hermosa de este planeta. -me dice Pascal abrazándome y yo hago lo mismo.

Un Amor Con RecetaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora