Happened in London (H.S)

Capítulo 4

Mar se encontraba sentada sobre su cama, mirando a su armario. ¿Qué iba a ponerse? Hoy era sábado, el día del desfile y debía estar perfecta, pero no sabia que ponerse. Se levanto de la cama decidida y cogió unos pantalones rojos y una camiseta manga corta blanca que quedarían genial. Saco también unas bailarinas negras, ideal. Dejo la ropa sobre la cama y se fue directa a la ducha. Quince minutos después salió del baño ya seca aunque con el pelo húmedo. Se colocó la ropa interior y cuando iba a ponerse los pantalones cambio de idea. De su armario saco un vestido largo azul cielo liso de tirantes y unas sandalias negras de tacón. Una vez vestida, volvió al baño para peinarse y maquillarse, se miro en el espejo, listo. 

Tras conducir durante veinte minutos llegaron al hotel Meliá White House, donde se celebraría el desfile. Dejaron el coche al aparcacoches y se dirigieron al gran  salón donde se celebraría. En la entrada se encontraron con Philip. Caminamos con él hasta detrás de la pasarela, donde se habían improvisado vestuarios y salas de maquillaje. 'Quince minutos' chillo alguien. Tan solo quedaban quince minutos para dar inicio al desfile y Mar junto con sus acompañantes se dirigieron a sus asientos para ver el desfile. Ya habían llegado todos los invitados cuando Philip subió a la pasarela para dar inicio al desfile. Las dos chicas miraban el desfile atentamente, aunque de vez en cuando miraban a su alrededor para ver a que invitados habían acudido al desfile. 

- Mar, están One Direction y Joe Jonas y a morir pronto - le susurro a su amiga en el oído

- Toda la vida soñando con ellos y resulta que son fieles clientes de nuestra marca de ropa - dijo ella

El desfile acabo dos horas y media después, cuando todos los invitados aplaudieron antes de ponerse en pie para el pequeño aperitivo que se había organizado para cuando terminara el desfile.  Philip y Mar estaban saludando y hablado con cada uno de los invitados, hasta toco el turno de One Direction, aunque faltaba uno de ellos. 

- Gran desfile, señorita - le dijo Liam mientras se estrechaban la mano

- Margarette Cánaves, por favor - sonrió ella - muchas gracias por venir

- Harry ha tenido que marcharse en mitad del desfile, se disculpa por ello - comento Louis

- Podéis decirle que se pase por las oficinas para que termine de ver la colección, a partir de mañana que se pase cuando quiera - ofreció ella

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- Kath, date prisa, no llegaremos - grito Mar a su amiga

- No chilles, me duele la cabeza - respondió la otra

- ¿Por qué te hice caso cuando ayer sugeriste que saliéramos? - pregunto mientras se preparaba su bol de leche con cereales

Cuando la morena llego a la cocina Mar puso su bol y cuchara en el lavavajillas y se fue a su habitación para vestirse. Quince minutos después las dos estaban perfectamente vestidas. 

Llegaron temprano a la oficina, aparcaron su coche en el parking y caminaron hasta una cafetería que había en la calle de enfrente. Se sentaron en una mesa pequeña y pidieron un café con leche para cada una y un muffin de arándanos para compartir. Habían desayunado hacia poco, pero un muffin nunca sentaba mal. Mar pago la cuenta y las dos chicas volvieron a la oficina. 

Eran las diez y media, tan solo llevaban una hora y media de trabajo y Mar no podía mas, haber salido la noche anterior siendo miércoles no había sido una buena idea. Salio de su despacho y camino hasta el de Kathryn. 

- Es la última vez que salgo entre semana. Bueno, es la última vez que te hago caso - dijo la chica entrando en el despacho de su amiga

- No vi que te quejaras anoche - le sonrió Kath

- Cállate. ¿Vienes a tomar algo a alguna cafetería? - pregunto la castaña

- ¿Lo dudabas? - respondió su amiga levantándose y cogiendo su cartera

Bajaron en ascensor hasta la planta principal y salieron a la calle. Decidieron ir al Starbucks que había en la misma acera que las oficinas, dos locales mas a la derecha. Había poca gente, solo dos mesas estaban ocupadas y una persona estaba haciendo un encargo. Mar se sentó en una mesa al lado de una ventana mientras su amiga iba a pedir. 

- Buenos días. Quisiera un zumo de naranja natural, un frappuccino de fresa, un trozo de bizcocho de naranja y mandarina y un croissant de jamón y queso. Gracias - ordeno la chica, pago y espero pocos minutos hasta que la camarera le dio una bandeja 

Camino hasta la mesa en la que se había sentado Mar y repartió lo que había pedido. 

- Muero de calor - dijo Mar mientras bebía de su zumo de naranja

- Prefiero mil veces esta calor que la calor infernal que hace en Mallorca - dijo la morena

- Te tomo la palabra - sonrió 

Quince minutos después las dos volvían a su trabajo mientras Mar llevaba Frappé de Moca Chocolate que había pedido antes de salir de la cafetería. Llegaron a la planta en la que se encontraban sus despachos y cada una tomo una dirección diferente, sus despachos estaban en lados opuestos de la planta. 

La castaña caminaba rápido y con paso firme hacia su despacho, hasta que choco con alguien y derramo su batido.