Llegué a casa sobre las 4 de la mañana, suponía que a esa hora estarían ya todos durmiendo a sí que decidí no hacer ruído, cojí el pomo de la puerta, metí la llave muy lentamente y la abrí, me quite los zapatos para no hacer ruído, puse un pie en un escalón y de repente una lámpara se encendio, al lado estaba mi padre sentado en el típico sillón y solto un:
-¿Se te hizo tarde, verdad?- Dijo mirando al suelo.
-Si, un poco tarde- Dije también mirando al suelo.
Podía ver en los ojos de mi padre desesperación, ira y frustación, es normal, a ningun padre le gustaría ver a su hijo borracho y fumado llegando a casa a las tantas.
Pasarón unos 20 segundos, mi padre rompió el silencio diciendo con un tono irónico:
-No pasa nada, mañana hablamos, estas castigado. Ahora vete a la cama-
Agache la cabeza y afirmé, no sé porqué mi padre se cree superior a mí, ¡¿porque sea uno de los políticos más famosos del mundo tiene que mandarme, a mi?! Subí los dos pisos, si esta jodida casa es de tres pisos, y mi habitación esta en el tercero, bf. Llegué y antes de abrir la puerta oí la cadena del lavabo, era mi hermanito Justin, el mediano, me agache me pusé a su altura, le pusé una mano en el hombro y le dijé:
-¿Que chaval, una mala noche?-
-Me imagino que no tan mala como la tuya, coleguita- Dijo poniendome la mano en la cabeza y despeinándome.
-Anda renacuajo, vete a dormir, los niños buenos a esta hora duermen- Le dije dando-le un fuerte abrazo.
Supongo que no podía dormir porque al día siguiente era el último día de curso, si, verano. Me dijo que el último día le iva a pedir salir a una tal Eva, o algo a si... Seguro que le dirá que si, no es por chulear ni nada parecido, tanto mis hermanos como yo, somos bastante guapetes.
Total, que me metí en la cama, intente dormir un poco pero antes de que cerrará los ojos mi padre apareció en la habitación y pregunto:
-¿Hijo, estas dormido?-
-Si. Vete por ahí.
La verdad esque vaciló bastante a mi padre, pero él no lo tiene en cuenta, dice que no se quiere enfadar con nosotros ya que nos ve muy poquito, bah, sentimentalismos. Se sentó en la cama y me dijó:
-Christian, se acabo, tomaré medidas, estoy harto de que no hagas nada, pasado mañana hablaremos, ahora me tengo que ir a Japón, creo que te tendré que dar malas noticias.
Se fué. Yo seguía estirado como si nada, esto mi padre me lo a dicho como unas cien veces, paso de él y sus movidas.
Cojí el teléfono y marque el número de Bieber, si Justin Bieber, lo conocí en primária, yo era prácticamente su mejor amigo, nos conocemos hace ocho o nueve años. No me lo cojía supongo que estaba durmiendo, le iva a preguntar si quedaríamos mañana.