Carne Linda - Lawlu

Capítulo 12: Hielo Fino

"¡Venga! No es difícil, cógeme de la mano", dice Luffy con una risita y tiende la mano a Law.

En este momento se desliza hacia atrás, sin temblor en su espada, a diferencia de su novio, que está frente a él. Law se aferra al lateral de la pista, con los nudillos blancos bajo los guantes y una maldición en la boca. Se suponía que esta iba a ser una primera cita divertida.

"¡No!" Law argumenta y consigue mantenerse de pie en lugar de agachado, "Voy a resolver esto sin tu ayuda. Por el amor de Dios, he estudiado medicina. Debería saber cómo funciona la distribución del peso".

Luffy se ríe, corta sus patines para mantener el impulso y hace un rápido giro sobre el suelo en su sitio. No es que no sea agradable ver a Luffy en algún lugar en el que vuelve a tener confianza, Law no está disgustado con esa parte. Simplemente no sabe por qué tiene que hacer en cosas en las que ni siquiera es bueno.

Los juegos de carnaval, el lanzamiento de hachas, y ahora esto. De todos esos pensó que al menos podría patinar. Pero viendo que se iba con su padre cada invierno a un lugar mucho más cálido, no es como si hubiera crecido con ello como todos los demás aquí.

"Torao, eres tan mono cuando te enfadas", regaña Luffy, deslizándose hacia atrás para caer junto a Law, "pero no tenemos por qué seguir haciendo esto si no quieres. Sólo era una idea para una cita. No me importa si nos vamos a pasar el rato al apartamento".

Law lanza una mirada a Luffy por debajo de su sombrero. Luffy ha insistido en ir a su casa desde que se conocieron, y aunque una parte de Law cree saber por qué, la otra mitad se da cuenta de que está tratando con Luffy. Intentar predecir a ese hombre es una tontería.

"Luffy, por favor", bromea Law, tendiéndole la mano y Luffy la coge ansiosamente con una suave risita, "tú ganas, ¿vale? Ahora estamos cogidos de la mano, y yo he fallado".

Luffy suelta una carcajada y tira de la mano de Law. "No has fracasado, pero ahora que me dejas cogerte de la mano podemos alejarnos del muro para los niños".

"¿Acabas de llamarme niño?". Law sisea, con la nariz roja por algo más que el frío.

Luffy no responde, simplemente sigue tirando de ellos hacia el centro. La gente patina mucho más rápido, con una gracia que Law no posee, ni ahora ni posiblemente nunca, supone. Al menos no con Luffy tirando ansiosamente de él.

Con una hábil presión contra su patín derecho, Luffy da una vuelta frente a Law y recoge su mano libre. Law intenta argumentar, pero se pierde en el brillo de los ojos de Luffy. La forma en que calma las cosas tan rápidamente con una mirada parece criminal.

"En vez de eso, te arrastraré así, para que sientas mejor lo que es mantener el equilibrio, ¿vale?". pregunta Luffy, pateándolos hacia atrás un poco más rápido, "No dejaré que te caigas, Torao".

El calor repta por la piel de Law, haciendo que el sudor empiece a formarse contra sus manos y vuelve a alegrarse de llevar guantes. Lo último que necesita es que Luffy sepa cuánto le afecta su tacto. Será como lo de las hachas de nuevo en más de un sentido. Al menos sus hermanos no están aquí.

"¡Oi!"

"Por el amor de..." Law gime al oír la voz, con los ojos revoloteando a un lado de la pista: "¿Qué haces aquí?".

El sonido del hielo cruje a su lado, y antes de que Law pueda pensar en explicarlo, tienen compañía. Más de una compañía, por supuesto. En realidad nunca aparecen sin el otro, al menos no desde que Law los conoce.

" Eustass", murmura Law, "¿Estas aquí para hacer llorar a los niños?".

El pelirrojo se ríe, cruza las manos detrás de la cabeza mientras se desliza en línea con Luffy. Sus hombros se rozan, apenas, y Law siente que quiere explotar. Un pensamiento que tiene que guardarse para otro momento, ya que también le toca el hombro. La presión se concentra para que no se caiga, pero hace que Law se balancee.