Cuando te fuiste

POV ENID

Si supieras que fuiste mi lugar seguro, la única persona a la que recurría cuando todo salía mal, cuando me sentía tan inútil, los días que llegaba a pensar que no era suficiente o simplemente pensaba que no encajaba en esta vida, vaya que lo bueno no dura para siempre.

Quisiera poder despertar y sentirte a mi lado como cada día, quisiera devolver el tiempo y quedarme en el pasado donde tú estabas conmigo cada día y al despertar cada mañana levantarme sintiéndome protegida.

Tu eras la persona que más ame en el mundo, sin ti ya no sé qué hacer, no tengo sueños, metas, ni aspiraciones a nada, todo lo que quería tiempo atrás ya no me satisface y si soy sincera, ya ni siquiera siento que avanzo, mi cerebro sobrepiensa las cosas, temo por mi futuro a pesar de que no se lo que estoy haciendo en el presente, quisiera que estuvieras aquí para dirigirme, guiarme de nuevo, alentarme y decirme que todo va a estar bien, que sigo siendo una persona importante.

Pero seamos honestos, tú no volverás, ya no estarás más en mi realidad solo eres el anhelo de mi egoísmo, que me ruega el tenerte a mi lado, abrazarte y no dejarte ir nunca.

Últimamente la gente me dice que debo descansar, otros dicen que duermo demasiado y la verdad siendo honestos, ya no puedo descansar, duermo para olvidar la realidad, para por lo menos unos momentos no pensar en el futuro y las tareas o personas en mi vida que llegan a agobiarme y me hacen desear volver a mi cama a seguir en el mundo onírico entre la vida y la muerte.

Dicen que el apego es malo y concuerdo con eso aunque no del todo, el apego es en cierta medida bueno pero si lo genera una persona con depresión y ansiedad obtenemos a mi persona aunque no en todos los casos somos iguales todos, en mi caso obtenemos a una persona que finge estar bien, una persona que apoya a todos pero nadie le apoya, una persona que por dentro está muerta y por fuera puede rebosar de alegría, una persona con un deseo profundo por la muerte y el descanso que está le puede brindar, pero al mismo tiempo el miedo y la incertidumbre que esta misma puede causar ante los ojos de un simple mortal con miedo de acabar con su propia vida.

Como puedo vivir, cuando tú te fuiste llevándote mi vida.