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☆ ★ ✮ ★ ☆Eran entre las 1:12 de la noche (Hora chilena), había una fuerte tormenta en ese momento, lograste escuchar las fuertes gotas de lluvia que caían sobre el tejado como si quisieran traspasar y llenar todo de agua a su paso, te despertarse en medio de la noche ya que el fuerte sonido de la lluvia no te dejaba dormir, es en ese preciso momento en que unos pasos se escuchan afuera de tu habitación, pasos pesados y firmes que caminan sobre el piso de madera del cuartel, traspasando el pasillo donde también están las habitaciones de otros soldados, de frotas los ojos suavemente y te pones los dedos en los oídos para intentar disipar el pitido molesto, los pasos se detienen frente a tu puerta y te congelas, mirando a la puerta, las sombras y la luz de la luna juegan suavemente dentro de tu habitación y las gotas de lluvia y el frío junto con ese suave y leve aroma a humedad y tierra mojada llena tus pulmones entrando por tu nariz, un leve golpecito se escucha en tu puerta antes de que la perilla se gire y la puerta se abre casi de una forma timida, entonces ves a tu compañero de equipo de KorTac, König, entrar a tu habitación con la cabeza agachada y su máscara cubriendo su rostro sonrojado por la vergüenza y la timidez que siente en este momento, sus suaves ojos azules tan hermosos y tranquilos mirando al suelo, era tierno ver a un hombre que mide dos metros de alto parecer tan inocente como un pequeño gatito, sueltas una leve risita que rápidamente cubres con tu mano de forma disimulada, König tartamudea y vacila un poco antes de hablarte, jugando torpemente con los dedos.
König: H-Hola...T/N, l-l-lamento venir a esta hora pero...
Se queda en silencio por unos momentos y logras ver cómo el se sonroja más y mas mientras habla.
El finalmente logra decir, sus ojos se levantan un poco del sueño para mirarte y ver tu reacción con algo de esperanza por tu aceptación, sonríes dulcemente y entiendes tus brazos, invitandolo a quedarse contigo por esta noche lluviosa.
-Ven aquí König, si quieres puedes dormir conmigo.
Dijiste con calma, siempre fuiste una persona amable y los demás en el cuartel te tenían gran respeto y cariño por tu personalidad dulce como un enfermero, siempre fuiste tan confiable, König dudó un poco, pero luego rápidamente agita la cabeza y corre hacia tu, su cuerpo grande, alto y musculoso se presiona sobre ti cuando el te da un fuerte abrazo y da un leve sollozo, pones la mano suavemente sobre su espalda para consolarlo y en ese momento, König se siente seguro, se siente seguro y querido por ti, sintiéndose a salvo en tus brazos...solo tu.
König: Tengo tanto miedo de perderte...
El dice mientras sus ojos azules como diamantes se llenan de pequeñas lágrimas, pasas una mano por su mejilla y le limpias las lágrimas con una sonrisa tierna y ambos se miran a los ojos profundamente.
-König, estoy aquí para ti, no voy a ir a ningún lado.
König: Lo prometes?.
-Si, lo prometo.
König deja de sollozar pero todavía le caen lágrimas, este hombre a estado solo por tanto tiempo, sintiéndose rechazado, sus duros recuerdos de la infancia, el bullying, toda la ira y su sed de sangre ahora parecen desvanecerse gracias a tus suaves caricias y tu personalidad reconfortante, König luego se quita los zapatos y se mete a la cama contigo, recostandose a tu lado y volviendo a abrazarte como a un osito de peluche, König huele el aroma de tu cabello y lo hace sentir mariposas en el estómago, el cierra poco a poco los ojos, sintiendo su cuerpo pesado por el sueño.
König: *murmurando* Eres el hombre más maravilloso que conozco T/N...
El dice, su voz cansada y arrastrando las palabras.
-Te quiero mucho König...
Dices sin siquiera pensarlo y rápidamente un sonrojo se esparce por tus mejillas, tu cara se calienta y te ves avergonzado, König se ríe y te da un suave beso en la mejilla.
König: Yo no te quiero, yo te amo.
Te sonrojas aún más y apoyas la cabeza en su pecho y también comienzas a cerrar los ojos.
-Yo también te amo König...
El te da un tierno beso en los labios para luego apoyar la cabeza en tu hombro, das un leve gemido de satisfacción y lo abrazas con fuerza, y entonces, la noche dejo de ser tan oscura, dejo de hacer frío, y ya ni siquiera notaste que llovía, solo eras tú y el...
Y lo amas.
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Hola hola estrellitas del espacio, espero les haya gustado está historia cortita que hice, lxs quiero mucho, byeee!. ❤️
