La corona del rey [EDITANDO]

6-Epifania

-Y-yo no-. El de casco no pudo terminar la oracion pues sintio el peso de un abrazo proviniente de Trollino.

-Perdoname, sé que no he estado presente cuando me necesitaban todos, sé que no estuve ahí cuando tu me necesitaste -. Forzó el agarre sin llegar a lastimar a su contrario.- Tu te preocupaste por mi y me cuidaste cuando más necesitaba ayuda, los demás compas siempre me supieron escuchar y yo-. Realizó una pausa.-Y yo no los merezco.

-Trollino, yo no quise lastimarte ni recalcar que eras alguien malo, solo queria que recordaras que tambien eres humano y que necesitas comenzar a vivir tu vida, no cometas el error que yo cometí con Victor-. Comenzó a acariciar levemente la espalda del azabache.

-El cual fue mi culpa, todos los malditos dias me arrepiento de no haberte dicho nada, aguantaste tus lagrimas, reclamos y gritos por el bien del equipo -. Se formo una sonrisa en su rostro.

-Ya no te preocupes, y sabes, realmente ustedes no tendrian la culpa de lo que pasó ni tampoco tendrian que soportar mis reclamos-. Soltaron su abrazo.

-Para eso están los amigos, para escucharte, algo que yo no hize-. Comentó el ojiazul.

-Ya dije, ustedes no tienen la culpa, ¿entiendes?-.

-Entiendo que soy una persona estresada, impulsiva y casí perfeccionista-. Concluir eso no le costó mucho esta vez pues no es la primera vez que tenia una charla intensa con su compañero, además de los constantes comentarios y platicas acerca de los problemas de Trollino por parte de sus demás compañeros que llevaban años intentando concientizar a aquel azabache de caracteristica corona.

El ojiazul soltó un suspiro largo.- Cambiar me va a costar un poco.

-No se cambia de la noche a la mañana.

El contrario solo soltó una risita y desvio la mirada mientras se acercaba a la cama y así sentarse en la orilla, para despues de unos segundos hablar.- Queria decirte acerca de lo de Victor y Acenix, pero algunas cosas se complicaron y-. Fue interrumpido.

-De cualquier manera me tenía que enterar, fuiste un buen amigo al guardarle ese secreto a Invictor.

-Pero tu eres mi mejor amigo no el.

-No te preocupes, no sabias que hacer y eso está bien.

Al español le sorprendia el optimismo de aquel chico que sin importar las adversidades mostraba su mejor lado, siempre dispuesto a ayudar.
-¿Por que eres así?-. Con un semblante melancolico se dirijio al de casco.

-¿Así como?.

-Casi siempre estas feliz, dispuesto a ayudar a los demás y aunque te lastimen eres humano con ellos.

-No sé, creo que todos necesitamos una segunda oportunidad y alguien que nos escuche y a mi me gusta mucho hacerlo-. "En efecto, el chico del que me enamore es perfecto", aquel pensamiento surguio de inmediato en la cabeza de Trollino.

-Vamos -. Añadió Trollino.

-¿A donde?.

-¿No reservaste un masaje?.

-A si, ¡si!.

Trollino se apresuró a salir y ya en la puerta comentó.- Por eso creo que eres gay-. A lo cual el contrario rio.

Pero antes de atender el pendiente fueron a desayunar, con ya platicas más amigables y una hermosa vista de los frondosos pinos y espesa neblina que abundaba a unos cuantos metros del cristal de la ventana.

-Me encanta este café, pero no tanto como el que tu preparas-. Continuando con la conversacion añadio el ojiazul.

-Vale, tal vez deberia meterme a la cocina y de paso cocinar galletas-. Se formo una sonrisa sobre el neon de su casco.

-Presumido-.

-Tu empezaste-. Bromeaban un poco.

-Con este frio no esta mal calentar un poco las cosas-. Trollino tomó un sorbo de su café.

-Con este frio te vas a desnudar al rato-. Con simplesa cogio su taza de chocolate.

Trollino trataba de no ahogarse en su café al ver a la gente que pasaba y le miraba raro tras lo dicho por su compañero.- Calla que os ven-. Fue interrumpido.

-No hay niños Trolli, ni te quejes-. Con una sonrisa victoriosa aclaraba, pues bien sabia que a su amigo le molestaba ciertas indiscreciones o chistes que hacian sus compañeros que solo adultos entenderian.

-Pero si ¿no?-. Volvia a bromear el de traje.

-Si May, con este frio me voy a quitar la ropa alrato -. Rodó los ojos.

-Veo que ya se llevan muy bien-. Se hizo de un lugar en la platica la chica de pañuelo rojo, la guia, a quien un dia antes habian aclarado que no eran pareja-. Hola-. Saludó por fin acompañada de una carcajada.

-Ay hola-. May alzó la mano para saludar.- Al principio no queria pero lo convencí.

-Hola, pero, no, no es lo que crees-. Se hizó de un nerviosismo el joven de ojos azules.

-No sé que crees tu, que creo yo-. Con una sonrisa picara se acerco a la mesa.

-Vale que-. No alcanzó a concluir su oracion.

-Trollino para un masaje no necesitas quitarte la playera, no es obligatorio asi que no entiendo por que estas nervioso, ni por que estas tartamudeando ni por que estas temblando-. Sonrio con los brazos cruzados el de traje.

La chica y el anteriormente mencionado soltaron un par de carcajadas, charlaron un rato y burlaron por la formalidad del azabache.

Más tarde ya se encontraban con las masajistas donde el ojiazul no desaprovecho oportunidad para presumir su trabajado cuerpo a las jovenes que ahí se encontraban las cuales bien lo recibieron con cumplidos.

En su primer semana de estancia solo estaban planeadas cuatro actividades las cuales realizaron con entusiasmo y esta vez sin contratiempos antes de que llegara aquel fin de semana que Trollino esperaba ansioso.

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Valgame la dichosa rebundancia que casí no alcanzo a terminar el capitulo pero creéme que valdrá la pena.

Si te han llegado masivamente notificaciones de actualizacion de anteriores capitulos, una disculpa, estaba editando, cambie un poco el concepto y la portada, si hay algo que no cuadra o no se entiende hazmelo saber por medio de un comentario en la parte del capitulo, por favor.

- Gracias por el apoyo.💗