Era Gulf

190 19 0
                                    


(Parte 1) 


Apenas había dormido, pensando en lo que iba a suceder dentro de poco. El capitán Suppasit, le envió un mensaje pidiendo, aunque más le pareció una orden, esperar listo en la salida del pueblo.

Aún faltaba para el amanecer, eran apenas las tres de la mañana cuando llegó al lugar acordado. Las luces de un auto se encendieron frente a él, mostrándole el camino que debía seguir. Cualquiera a esa hora daría marcha atrás y saldría huyendo del lugar, parecía el inicio de una película de terror, nada más faltaba que alguien apareciera con un cuchillo dispuesto a degollarlo, pero ese alguien, no era otro que Mew Suppasit, parado frente a él.

Aparcó su camioneta justo frente al jeep del capitán y avanzó hacia él.

—Hola Gulf.

—Hola, Capitán. ¿Qué hacemos aquí, a esta hora de la madrugada?

—Sígueme.

El capitán Suppasit, caminaba delante de Gulf, guiándolo por un sendero. Lo llevó bastante lejos. "Propiedad privada", decía el letrero de la reja que atravesaron, antes de adentrarse en un bosque. La lluvia empezaba a caer y el frío se hacía intenso. Gulf pensaba que su idea de la película de terror no parecía tan descabellada en ese momento. Estaba empezando a preocuparse.

—No te hagas ideas falsas Gulf, casi llegamos. —Como si adivinara lo que estaba pensando el capitán habló.

Caminaron hasta lo que parecía ser una cabaña abandonada, bueno, no tan abandonada, porque había algunas lámparas colgando en la entrada. El capitán abrió la puerta y lo invitó a pasar. Dentro, el fuego estaba encendido, y frente a la chimenea, sobre una gruesa y felpuda alfombra, había un montón de cojines multicolor. En la mesita ratona una botella de vino, algunos aperitivos y candelabros con velas que iluminaban tenuemente el lugar.

—Wow... esto...

—Puedes quitarte la ropa mojada. La pondremos cerca del fuego, para que se seque. —Gulf se quedó parado, a corta distancia del capitán, sin mover un sólo músculo—. ¡Que te quites la ropa, Gulf! —insistió, él.

Se quitó la chaqueta, la camisa, los zapatos y desabrochó su pantalón; debido al frío sus dientes castañearon y el capitán Suppasit, rápidamente se acercó a él, cubriéndolo con una manta. Lo acercó más al fuego y fue él mismo quien terminó de desvestirlo. Teniéndolo, ya, completamente desnudo, porque Gulf no llevaba ropa interior.

Gulf estaba nervioso. El capitán Suppasit, parado frente a él, empezó a despojarse de su propia ropa. Se quitó la guerrera que llevaba puesta, y la dejó en un sillón, se quitó las botas, y bajó su pantalón con todo y ropa interior, continuó con sus calcetines y para el final, dejó la blanca camiseta. Gulf no podía separar sus ojos del hombre frente a él, su polla ya había reaccionado, y a pesar del frío, estaba empalmada y empezando a gotear líquido preseminal. Cuando el capitán se liberó de la camiseta y le mostró sus endurecidos pectorales, Gulf suspiró.

—Y-yo... —se dejó caer de golpe sobre los cojines.

—¿No irás a decirme que estás asustado Gulf?

—Por supuesto que no, capitán, es solo que-

—Sabemos a lo que venimos, Gulf. Ya no eres el joven cuya virginidad voy a tomar. —Gulf tragó saliva. Era verdad. Lo que él quería era recrear una fantasía sexual. Tenía que entregarse al capitán Suppasit, rendirse ante él, en cuerpo y alma. Lo habían platicado antes y estaba dispuesto a hacer cualquier cosa— ¡Vamos, ponte de pie, soldado! —ordenó el capitán con voz de mando y Gulf se paró en el acto.

Sweet pleasure - MewGulf 🔥 (+18) - HP7.1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora