🍃

375 66 11
                                    

¿Flores? No

A Lionel Messi no le gustan las flores.

Recuerda a su padre llevarle un ramo de flores a su madre, se las daba en momentos especiales o cuando quería ser detallista.

Pero nunca encontró el sentido de que le regalara flores.

Recuerda también que llevaron muchas el día que falleció su abuela.

Pero no entendía porque le daban flores a su abuela que se había ido.

Las flores no le gustan y por esa razón jamás las había regalado.

O hubiera esperado que se las dieran a él.

La primera vez que recibió una fue después de un entrenamiento, al desdoblar su sudadera para cubrirse del viento helado, una acacia amarilla cayó del doblez.

Extrañado miró a todos lados pero nadie parecía prestarle atención como para ver si alguien se la había puesto ahí, lo único que hizo en ese momento fue dejarla sobre la banca, tomar sus cosas e irse a su casa.

La segunda vez que encontró una, era un margarita amarilla que estaba sostenido por los limpiaparabrisas de su coche, esta la dejó en el pasto de la avenida y emprendió el camino a casa.

En menos de una semana Leo había recibido ya tres tipos de flores amarillas y todas las había hecho a un lado olvidándolas por completo.

A él no le gustan las flores, pero alguien se las estaba regalando, eso era seguro.

Un no me olvides amarillo en el asiento a la hora de la comida, un clavel en la puerta de su casa, una gardenia al salir de las duchas… Pique le entregó un ramo de rosas amarillas qué eran para Leo pero que por error se las habían dado a él.

Orquídeas, girasoles, gerberas…

Ya era un mes recibiendo al menos una flor diaria y comenzaba a molestarle.

A pesar de que las flores no le gustan no tenía el valor para tirarlas a la basura, así que las dejaba en los jardines, el parque o se las daba a alguna dama qué pasará por la calle.

A pesar de lo extraño de la situación y de que no sabía quién le regalaba las flores no le molestaba la situación, solo no le gusta el detalle, las flores eran bonitas y sabía que debían de tener algún significado, pero no le gustan.

O eso creía él.

Un día de repente estas dejaron de llegar.

Más de un mes recibiendo flores casi a diario y de repente dejo de encontrarlas.

Cuando eso paso solo suspiró, al menos ya no tendría que preocuparse por eso. Sin embargo, al no encontrarlas en el parabrisas de su coche, entre sus cosas después del entrenamiento o en la puerta de su casa, tuvo una extraña sensación de abandono.

La sorpresa en si era encantadora y la expectativa de que flor encontraría al día siguiente era entretenido…

Y ahora no estaban.

Quiso pensar que a lo mejor se acabaron las flores amarillas, pero al investigar sobre que tipo de flores existían, se dio cuenta que no había recibido ni un solo tulipán.

Ese día no dejaba de pensar en quien se las habría regalado y porque se fue tan de repente.

Pasaron varios días y el tema quedó olvidado, volvió a su rutina habitual y dejó el tema de lado.

Entonces, al término de su mejor partido qué lo había vuelto ganador indiscutible, ahí estaba…

El tulipán amarillo.

A Leo no le gustaban las flores pero ver ese tulipán le aceleró el corazón y más al ver quien la sostenía.

Guillermo Ochoa había llegado de préstamo hace poco menos de seis meses y en ese tiempo no le había prestado la atención debida, de haberlo hecho se hubiera dado cuenta que cuando recibió la primera flor, Guille estaba al fondo del vestuario, escondido detrás de Xavi mirando de reojo su reacción a la primera flor.

Se hubiera dado cuenta que el crisantemo qué dejaron en su asiento era el mismo asiento en el que momentos antes Memo había usado.

Que se despidió de Guille esa tarde que encontró la flor en el parabrisas diciéndole que iba a casa a descansar.

Que le dijo a Pique que esas flores eran para Leo no para él …

Y muchos detalles más.

Guille nunca tuvo el valor de hablarle de frente, así que le demostraba el cariño que le tenía desde la primera vez que lo vio con una flor como regalo, pero Guille no se había dado cuenta que así como él era tímido con Leo, a Leo no le gustaban las flores…

Cuando lo notó ya no tuvo el valor de darle el tulipán y dejó en el olvido ese intento de acercarse a él.

Pero entonces vio como los ojos de Leo se iluminaban al día siguiente esperando una flor más, al mismo tiempo como se decepcionaba al no encontrar esa bella sorpresa.

Sin darse cuenta Leo se iba dando cuenta que aquel No me gustan, termino en No me gustaban.

Asi qué Memo se armó de valor y le entregó la flor amarilla a Leo que tomo con una sonrisa directamente esperando que no la rechazara.

Con una voz tímida le contó lo que había hecho en todo ese tiempo y con una gran carcajada Leo lo invito a tomar algo...






A Leo no le gustaban las flores…

Porque jamás creyó que alguien se las regalara de corazón.

rosa: amor o deseoacacias: amores secretosmargaritas: ideales para comenzar la conquistagardenias: amor incondicional

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

rosa: amor o deseo
acacias: amores secretos
margaritas: ideales para comenzar la conquista
gardenias: amor incondicional.

claveles: amigo enamorado
no me olvides: eterno enamorado
tulipanes: amor sincero

girasoles: admiración
orquídeas: de manera sutil expresan deseo
gerberas: ternura  y alegría

¿Flores? NoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora