Año 2015, 2 de diciembre, 7:00 A.M
Al abrir sus ojos su cabeza punzaba como si algo estuviera taladrando allí con fuerza, se sentía sin ganas y ni siquiera sabía quién era o dónde estaba. El olor a alcohol era nauseabundo, pero familiar, desgraciadamente familiar.
Con pesar de sentó en su cama, porque esa era su cama ¿no? Si, esa era su habitación, el póster de Terminator en la pared y el abanico chillón se lo confirmaron. No tardó en ponerse de pie, mareado, sus pies pesaban, pero aún así hizo lo que pudo para dirigirse hacia el baño y cepillar sus dientes con monotonía. El espejo roto se burlaba de lo demacrado que estaba, era así siempre que se ponía ebrio hasta el culo. Ni siquiera recordaba lo que había pasado en la noche anterior, sólo recordaba haber tenido una charla muy interactiva con alguien que no recordaba. De repente sintió un escalofrío recorrer su cuerpo y depositarse en la parte baja de su espalda ¿Tenía problemas en el coxis o por qué le dolía tanto el culo?
De repente se percató de que habían manchas extrañas en su camisa, ¿sangre? No recordaba haber tenido alguna pelea, pero con lo borracho que estaba era obvio que no iba recordar. Se quitó la camiseta depositandola en la cesta de ropa sucia y con el pecho al descubierto salió de su habitación.
-Hasta que al fin.
La voz hartante de su madre resonó en la sala, su voz era gruesa, como si ella desayunara un kilo de cigarros todos los días, cosa que no estaba muy alejada de la realidad. No respondió y sólo se dispuso a tomar la caja de cereal entrando su mano allí para tomar un puño comiendo.
-Tu padre ya salió, Taehyung, no lo molestes mucho hoy, está muy ocupado estos días así que portaré bien, ayer no durmió esperando a que llegaras, tuve que darle pastillas -ella suspiros harta de la situación, hasta de su familia.
Taehyung se designó a asentir con la cabeza sin detener su asalto hacia la caja de cereales, ese día era sábado y por ende no había clases, no por nada se bebió medio bar ayer en la noche.
Luego de terminar sus labores matutinas; las cuales se resumían en comer cereal, darse una ducha y ver las publicaciones que habían hecho sus amigos sobre la noche anterior, Taehyung caminó fuera de su casa, respirando el agradable olor a orina y colilla de cigarros. Así olía todo el pueblo, excepto aquella parte de riquitos excéntricos y miserables, ellos si que viven la buena vida.
Brillert era un pueblo pequeño y viejo, atrasado en tecnología y en educación, eran desconocidos y las personas importantes jamás pasaban por ahí, eran como el viejo Oasis Sprint del Rayo Macken. Allí reinaba la discordia y la corrupción, al no haber ningún gobierno que se interesara en ellos, pues hacían sus propias leyes.
Caminado por la vereda se arrepintió de no llevar un abrigo consigo, pero claro, el gran Kim Taehyung era inmortal al parecer. Llegó al local de la familia Jung, establecimiento de comida muy cocina en el pueblo, la señora Jung sí que sabía cómo hacer un buen arroz.
-Hey.
-Hey -Jung Hoseok respondió a su saludo. Hoseok era el amigo de todos, sabía todo lo que se movía y dejaba de moverse. Era un chico muy energético, pero esa mañana estaba extrañamente tranquilo y algo apagado.
-¿Todo bien? -No es como que le importara, pero si quería extra azúcar en su café tendría que portarse bien.
-Hmh, para nada -suspiró preparando la conocida taza de café del castaño.
-¿Se puede saber por qué? -Preguntó está vez con algo de brusquedad, no le gustaba el estar rogando para que le dijeran las cosas. Hoseok lo miró, buscando alguna señal de que estuviera bromeando- Jodete, si no me quieres dec-
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𝐀𝐅𝐓𝐄𝐑 𝐃𝐀𝐑𝐊 ©
De Todo♡̸ Cha Wonwoo había desaparecido misteriosamente una mañana de diciembre, las llamadas y mensajes no entraban a su teléfono, el pueblo era pequeño, pero tras largas horas de búsqueda no lo habían encontrado. Las últimas personas con quienes se le fu...