Capitulo 1.

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Me despertó la increíblemente molesta luz del sol, solo porque el tiene que salir todas las mañanas a alumbrarnos no significa que tenga que despertarnos tan groseramente, no le dimos ese trabajo nosotros ¿cierto?. Abro los ojos, y me siento en la orilla de la cama, le hecho un rápido vistazo a el reloj, 6:40, bostezo y me estiro.

¡Mierda!¡6:40!-me levanto como rayo hacia el baño, demonios de nuevo inicio la semana mal.

Si, todos los lunes es la misma historia, se me hace tarde para el trabajo, pero si ese mal nacido de mi jefe fuera menos prepotente, no tendríamos que vivir con este tipo de prisas y miedos. Termino de arreglarme lo más rápido que puedo, y bajo corriendo del edificio hacia la cafetería más cercana. Las desventajas de ser la asistente personal del bastardo prepotente, Louis Tomlinson. Entro a la tienda, y la enorme fila que hay me hace querer darme un tiro, por suerte el chico lindo esta de turno.

¡Hey, ____!-me llama y me dirijo hacia el esquivando las miradas de odio de las personas en la fila- aquí tienes, dos cafés latte de soya-los tomo y le agradezco infinitamente antes de salir disparada a la editorial donde trabajo.

Entro corriendo al edificio, directo al ascensor, por suerte lo detuve antes de que subiera sin mi y me hiciera perder 5 valiosos minutos, salgo casi corriendo del ascensor y me dirijo a la oficina del Sr. Tomlinson, y en el camino, choco con alguien y uno de los cafés se me derrama en la ropa.

-¡Maldicion, fíjate inútil!-le grito al pobre chico con el que choque.

-Dame tu blusa-le digo a una de las secretarias que se ve de mi talla.
-¿que?-me responde ella confundida, pero no hay tiempo de explicar, porque el demonio en persona no tarda en llegar.
-Te doy un pase VIP doble a la alfombra roja este mes, tienes 5 segundos para pensarlo-sin nada que pensar la pobre chica intercambia ropa conmigo y corro a la oficina de Tomlinson para esperarlo.

Cuando el área de secretaria se inunda en silencio, se que el esta aquí.

-buenos días Sr. Tomlinson, le recuerdo la cita de las 9:00 con la editorial San Francisco, a las 9:35 con el Sr. Clifford, y con su abogado a las 11:00-le digo en cuanto atraviesa la puerta a su oficina, arrancando el café de mis manos y sentándose en su escritorio.

-pospón la cita con la editorial, cancela a Clifford pero mantén la cita del abogado-dice Tomlinson rápidamente- y escribe un contrato para Frank, Oprah lo acepto.

-wow, bien hecho-digo realmente azorada, conseguir a Oprah es algo difícil.

-si quisiera que me elogiaras, te lo ordenaría-contesto cortante y frío como siempre.

Ya estaba saliendo de la oficina cuando su voz llamándome me detuvo.

-¿quién es Julián y porque quiere que lo llame?-demandó saber mi jefe con su vista puesta en el vaso de café, donde había un pequeño escrito. Nos mantuvimos la vista unos segundos antes de poder contestarle.-bueno, ese era originalmente mi café- dije bajando la mirada.
-oh, ¿y porque estoy bebiendo tu café?-pregunto recargándose en el respaldo de su silla aun con el café en las manos.
-Porque su café se derramó...-trague saliva nerviosa y lo observe fruncir sus labios y asentir mientras le daba un sorbo al café.
-¿no es gracioso que bebamos el mismo tipo de café?-me miraba mientras depositaba el caso de café cuidadosamente sobre su escritorio.-¿es acaso una coincidencia?

-Increíblemente así es, señor-dije tratando de ocultar los nervios.- Quiero decir, no bebería el mismo café que usted en caso de que se derramara accidentalmente, eso sería patético-sonó el teléfono de su oficina y respondí, salvándome de el resto de la conversación.
-Buenos días, oficina del Sr. Tomlinson-hablaba por el teléfono mientras observaba de reojo a mi muy apuesto y muy grosero jefe.-oh, hola Rob.-al escuchar su nombre mi jefe me dio la seña, "dile que vamos hacia allá. Así que eso hice..-en realidad nos dirigimos hacia tu oficina Rob, si-pronuncie rápido lo ultimo y colgué confundida.
-¿Porque estamos yendo a la oficina de Rob?-trate de obtener respuesta, y la única que obtuve fue una sonrisa de lado, así que salí rápidamente de su oficina hacia mi cubículo, y escribí un mensaje a todos mis compañeros.
"El diablo mismo, apunto de aparecer"

En cuanto lo envié, todos dejaron de hablar y regresaron como robots al trabajo, y justo en ese instante salió de su oficina el Sr. Tomlinson, encaminándose a la oficina de Rob, por lo cual, como asistente personal, apure el paso para alcanzarlo.
Y para mi buena suerte, sarcásticamente hablando claro, nos topamos a la chica con la que había intercambiado la ropa, y le rogué a Dios porque el jefe no se diera cuenta de la horrible mancha de café.
-bueno, en realidad creo que bebes el mismo café que yo en caso de que lo derrames, lo que es definitivamente, muy patético-dijo aun caminando pero mirando notablemente de reojo a la pobre chica que se había puesto roja como tomate.
-Quizás debería estar impresionado, jefe-dije tratando de aligerar el ambiente.
-Lo estaría, si no hubieras derramado el café, ahora recuerda que eres solo una secretaria y deja tus comentarios inteligentes de lado-dijo, y fue lo ultimo de nuestra conversación porque entro, sin siquiera tocar, a la oficina de Rob.

-¡oh!, nuestra magnifica líder y su séquito, por favor pasen-exclamo Rob, leyendo unos papeles.
-vaya, lindo cuadro ¿es nuevo?-el Sr.Tomlinson, dirigiéndose a Rob.
-pues fue pintado en 1800, pero es nuevo en mi oficina-contesto Rob, con una pequeña risa.
-Rob, eres libre-comentó el jefe, ignorando por completo el comentario anterior de Rob, y ante tales palabras Rob se queda sorprendido.- te pedí cientos de veces que consiguieras a Oprah para la entrevista con Frank, y no lo hiciste, estas despedido.
-Le dije que era imposible señor, Frank no ha tenido entrevistas en 20 años-dijo Rob, sin aliento, sacándose las gafas. Mientras yo observaba todo realmente sorprendida. No esperaba eso.
-bueno, eso es muy raro, ya que yo misma conseguí que Oprah entrevistará a Frank-respondió con calma, Tomlinson.
-¿disculpe?-dijo Rob, mas sorprendido que antes, mirándome de reojo.
-Ni siquiera intentaste llamar ¿cierto?-dijo el jefe, mientras caminaba hacia el escritorio de Rob- ahora, te doy dos meses para encontrar otro empleo, y que les digas a todos que te resignas, ¿de acuerdo?-sonrío, y salió lentamente de la oficina, dejando a un Rob, completamente ido en la oficina.

-¿cual fue su reacción?-me pregunto, mientras yo volteaba a ver no muy discretamente por la pared de cristal hacia Rob.
-Se esta moviendo, y tiene una mirada loca-le respondo a mi jefe a lo que el susurra un casi inaudible "no lo hagas Rob". Y justo después de eso un Rob, realmente molesto sale al pasillo a enfrentar al jefe.
-¡Tu!¡Bastardo mal nacido!-grito Rob, señalando a Tomlinson, llamando la atención de todos-¡no puedes despedirme!¿crees que no me doy cuenta? Consiguiendo a Oprah con tus pactos demoniacos solo para ser siempre el mejor...¡porque tenias miedo de que te quitara tu lugar!¡eres un monstruo!
-basta Rob-dijo Tomlinson, son una sonrisa socarrona en el rostro, mientras todos observaban anonadados la discusión, incluyéndome.
-Solo porque no tienes una vida fuera de aquí...-continuaba Rob, yo, si fuera el, habría cerrado la maldita boca.-solo por eso crees que puedes tratarnos a todos como tus esclavos personales,¿sabes que?, siento lastima por ti. Porque, ¿sabes que vas a tener el día de tu muerte?, nada ni nadie.-termino diciendo Rob. Hubo unos segundos de silencio, hasta el suspiro de "relajación" de el jefe.
-Escucha con atención Rob, no te despido porque siento que no puedo contigo. No. Te despido porque eres flojo, estupido, incompetente...-camino dos pasos al frente, enumerando con los dedos los adjetivos calificativos para Rob.- además de que pasas mas tiempo engañando a tu esposa que en tu oficina. Y si dices una palabra mas, ____ se encargara de decirle a seguridad que te saque a patadas del lugar..-justo cuando Rob iba a hablar de nuevo, lo interrumpió-UNA PALABRA MAS, y sales de este lugar por la fuerza, y ____ grabara todo y lo publicara en ese sitio de internet, ¿cómo se llamaba?-dirigió su pregunta a mi.
-YouTube-respondí con miedo.
-exacto, YouTube. ¿Es lo que quieres?-Rob se quedo callado y Tomlinson finalizó con...-es lo que creí. Tengo trabajo que hacer.

Se dio la vuelta, y camino hacia su oficina conmigo casi pisando sus talones y todos volvieron al trabajo.
-Dile a seguridad que saque de su oficina el nuevo cuadro y lo ponga en mi sala de conferencias-dijo viéndome de reojo.
-Eso haré señor-respondo simplemente.
-Y te necesito aquí este fin de semana ____, para revisar sus documentos y los manuscritos-dijo, con ese tono al que no entra nada en discusión.
-¿este fin de semana?-dije con sorpresa en mi voz.
-¿algún problema con eso?-pregunto el sin siquiera voltear a mirarme.
-oh no, solo es el cumpleaños 90 de mi abuelo, y esperaba ir a verlo a casa..-explique pero el ya había entrado a su oficina, cerrándome la puerta en la cara.-Okay...cancelare.

Vaya idiota.

"La propuesta"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora