La mañana se asomaba sobre la Ciudad Orange, un lugar que solía lucir realmente hermoso antes de que un pirata y su tripulación llegarán a saquear y destruir todo lo que encontraron. La población terminó reducida a ser simple carnada y "público" de un acto sin final que Buggy hacia en una carpa en medio de todo el lugar. Todos vivían atemorizados y asustados hasta la médula por ese pirata que amenazaba sus vidas a cada momento en el que un respiro salía de su estúpidamente grande y roja nariz.
Pero el gusto a Buggy no le iba a durar lo suficiente.
—¡Jefe! ¡encontramos a una mujer vagando por la playa!—exclamó orgullosamente un tripulante del payaso.
Buggy, con su típico porte dramático y completamente inecesaria locura de circo; volteo el cuerpo con una sonrisa algo desquiciada y juntó sus manos lentamente.
—¿Mujer? ¿se nos ha escapado un habitante?—indagó el pirata de cabello azul sin borrar la sonrisa.
—Para nada señor, no luce como alguien del pueblo. Se viste demasiado bien.—negó el hombre.
Buggy, con curiosidad frunció el labio y alzó una ceja.
—Traiganla, quiero verla.—ordeno él, haciendo una seña con la mano para que la trajeran ante él.
Sin más preguntas, su tripulante salió corriendo acatando las órdenes de su capitán. Al cabo de un minuto, tres piratas llegaron sosteniendo a la mujer quien estaba amordazada de boca y manos; rápidamente Buggy ladeó la cabeza al ver la vestimenta de la joven, vestido negro que lucía de buen material, buenos zapatos y una cruz de oro colgando de su cuello.
—Definitivamente es algo curiosa.—murmuro Buggy al tenerla ante él, fijo su mirada en la de ella y ladeo la cabeza al no divisar su iris de su pupila.—Muy curiosa.
—¿Yomh somh lom curiosnm?—Buggy frunció más el gesto al no entender lo que la joven intentaba comunicarle debido a la mordaza.
—Quitenle eso, no le entiendo una palabra.—rapidamente le quitaron la tela de la boca a la joven y está misma escupió y quejó ante la molestia que le había dado eso.—¿Decías?
—¿Yo soy la curiosa? ¿ya te viste la cara?
Todo se quedó en silencio sepulcral a la voz de la mujer, la cuál se quedó fija en mirada con el capitán. La tripulación del payaso de quedó helada con la boca abierta de par en par y sudor frío recorriendo les lugares que nisiquiera el sol veía.
Buggy, se había quedado sin moverse por unos largos segundos, pero luego rompió su silencio dejando salir una risa desquiciada al aire mientras se sostenía las manos en el estómago y literalmente la risa le hacía llorar.
—¡Esta mujer tiene mucho valor!—exclamó finalmente Buggy al dejar de reír, luego volvió a voltear a la pelinegra y le ofreció una sonrisa.—Me agrada.
Ella movió la cabeza para llevarse el cabello detrás de los hombros, luego solo volteó hacia su alrededor y frunció el gesto al ver a la población de ese lugar verle totalmente atemorizados.
—De no ser porque estoy buscando algo, créeme que ya habría venido por ti hace meses.—balbuceo la bella joven, quien vió de mala manera a Buggy.—Estarias en el medio del mar.
Buggy bufó y se cruzó de brazos.
—¿Quién eres? ¿Gold D. Roger?—burló Buggy.—No puedes ni levantar una bala de cañón.—la mujer puso los ojos en blanco mientras reían de la mala broma del capitán.—No seas creída, cariño.
"Cariño tu abuela." Pensó la mujer frunciendo el labio.
—Ya enserio ¿que haces en mis costas?—indagó Buggy confuso volviendo a cruzar los brazos.
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OLDER ᵈʳᵃᶜᵘˡᵉ ᵐⁱʰᵃʷᵏ
Fanfiction𝗛𝗶𝗻𝗮 𝗦𝗼𝘁𝗼 es una habitante de la Villa Shimotsuki, en donde es detestada por todos los habitantes después de haber sido plantada en el altar por su prometido, Roronoa Zoro. Durante un tiempo todos la han odiado ya que es muy importante que u...