𝐂𝐚𝐩. 𝟐𝟓

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Sunghoon había obedecido las súplicas del mayor, quien ahora se encontraba sobre su cuerpo rogándole que le tocará.

Por favor, hazme sentir bien Sunghoon. ─ Jake se movía inquieto en el regazo del delta, estaba impaciente por sentirlo.

Los labios del menor se dirigieron a su cuello, quería hacerle saber a todos que efectivamente, Jake era suyo... Recorrió con besos su pecho, de vez en cuando dejaba algunas mordidas y esto ocasionaba que los jadeos del Omega se convirtiera en grillos más sonoros.

─ Eres precioso Hyung. ─ Sunghoon lamía con delicadeza uno de los pezones del rubio, Jake no podía hacer más que soltar sonoros gemidos, el delta adoraba eso.

─ ¡Agh... D-Delta! ─ Los ojos del mayor se abrieron de sorpresa al sentir los dientes de Park mordiendo delicadamente su botón. ─ Más... Ah. ─ El ex alfa apretaba con fuerza las sábanas, nunca se había sentido como aquél día.

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¡Aah... Ahí, Sí... Mgh... ─ Park embestía a su mayor sin piedad alguna. El sonido de ambas pieles chocando era muy fuerte, en cualquier momento los padres de Jake podían entrar y sacar al Delta a golpes, ero en ese momento les daba igual. ─ Oh, Dios... Me encanta!

─ No Hyung... ─ Sunghoon lamía su cuello con ímpetu, dispuesto a remarcar la mordida en su piel. ─ No es Oh Dios, es Oh Delta, o algo así. ─ Shim sonrió, ese niño le producía tanta ternura a pesar de que en ese momento lo estuviera preparando para no caminar en un largo tiempo.

Park Sunghoon... Aah. ─ El menor se sintió extasiado al escuchar su nombre saliendo de los labios del mayor, y sin previo aviso mordió el cuello de Jake nuevamente. ─ ¡A-Aah! ─ un gritillo anuncio como su ahora Omega llegaba al orgasmo.

Ambos se abrazaron mientras el nudo comenzaba a hacer acto de presencia, los ojitos de Shim soltaban lágrimas... No recordaba que doliera tanto, pero los besos de su Park Sunghoon le hacían que el dolor disminuyera.

─ Hyung, no sabe cuánto había deseado estar así con usted. ─ Dijo Sunghoon acariciando la cintura de su mayor. ─ Usted al fin está aceptando mis caricias, y no solo por su instinto. ─ Sus besos no paraban. ─ Hyung, voy a prometerle una cosa.

─ ¿Qué haces? ─ Jake se estremeció cuando el menor le abrazo de tal forma de que su cabeza quedará en contacto con su pecho.

─ ¿Lo escucha? ─ sonrió, el nudo comenzaba a desaparecer. ─ Mi corazón está latiendo rápido, muy rápido... ¿Sabe quién es el culpable? ─ Jake sintió como su pulso también se aceleraba. ─ Así es, Shim Jake... Me gustas, no... Me encantas, me fascinas. ─ Jake solo quería escuchar las dos palabras salir de los labios del delta.

"Te amo."

𝗗𝗘𝗟𝗧𝗔 » 𝘀𝘂𝗻𝗴𝗷𝗮𝗸𝗲 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora