Entre un "te amo" o un "adiós"

1| ¿Ya dije que amo el verano?

Siempre supe que en la vida hay dos tipos de personas. Los que “odian” la escuela, y los que “aman” la escuela.

Y yo pertenezco obviamente al maravilloso grupo de los que la odian. Si, quizás puede sonar demasiado infantil esa respuesta, pero hablando en serio ¿A quién le gusta quedarse hasta las 5:30 pm en un salón, encerrado, con personas que se hacen llamar tus “compañeros” pero en realidad parecen monos estudiando matemáticas? Agh, pienso en matemáticas y el cerebro me explota.

¿Pero saben qué? ¡Que se vayan a la mierda las matemáticas que se vienen las vacaciones!

Yo amo el verano.

El amor de mi vida es el verano.

Y el que diga lo contrario del verano lo mato a balazos. (Es broma, obvio.)

Para mí el verano es lo mejor. Solo piénsenlo, no hay tareas, no hay exámenes, no hay escuela, ¡Simplemente es una bendición de dios!

Se merece todo mi respeto la persona que inventó las vacaciones y el verano. Cuando descubra quien fue esa persona, imprimiré una fotografía de él, la colgaré en mi habitación y le rezaré cada día de mi vida.

Llevo los días contados, todos los días le recuerdo a Alan cuanto falta para salir de este infierno llamado: “Escuela.”

¿Quieren un conteo? Pues, si estamos a 10 de mayo y este año salimos el 11 de junio de vacaciones, eso quiere decir que me queda… un mes y un día, que si eso lo transformo en días son 32 días, un total de 768 horas, 46080 minutos, o más de 2 millones de segundos.

En pocas palabras, tengo todo un mes para iniciar una pelea, o crear polémica porque después nadie se va a acordar de eso en las vacaciones. Soy un genio.

Mi madre me ha recordado millones de veces que disfrute mis últimos años en la escuela ya que según ella son los mejores años porque después todo cambiara y bla, bla, bla… pero y a mí que me importa. Mis compañeros tienen demasiadas polémicas y dramas que no quiero recordar en la universidad. Han estado desde hace dos años viendo lo de un supuesto "cuadro" que quieren hacer para el recuerdo, pero yo no quiero tener en mi cuarto sus horribles caras y decir: "¡Ay como los extraño, ojalá volver a esos tiempos!"  Y después subirlo a Instagram etiquetando a todos los alumnos del salón. Primero muerto antes de subir eso a Instagram, mantengo aún con vida lo que se hace llamar “dignidad” que al parecer muchos ya no tienen.

Este vendría siendo mi penúltimo año, el próximo va a ser el peor porque es el último, y no quiero ser adulto, ni siquiera sé a qué universidad ir. Soy todo lo contrario a Alan, ya que él tiene como 50 opciones de universidades y demás que de esas 50 queda en 49. Yo a la que postule está muy asegurado de que no entraré, necesito demasiada suerte como para entrar a una. A este paso voy a tener que hacerle un amarre al director para que me deje entrar por lo menos con una beca incluida para salvar mi futuro en el que seré adulto responsable.

A ver ¿tan difícil será entrar a alguna para estudiar danza? Es que, si ya voy a una academia, tengo igual bastante experiencia, no debe ser tan difícil que me acepten. Además, tengo un campeonato "mundial" a la vuelta de la esquina que es en otro continente y eso me está aterrando. Quizá si en una de esas gano con mi solo, puede que un productor me dé una beca, me entreviste y me vuelva famoso.

A quien engaño, ese era mi sueño de pequeño cuando iba al supermercado y me ponía a cantar en algún pasillo por si un producto de Disney me veía y de la nada me dijera "¡Wow! Eres perfecto para nuestro nuevo programa, y también, tienes tanto talento que haré que tengas una aparición especial en Hannah Montana."

Yo si quería salir en Hannah Montana.

Pero bueno... ¿ya dije que amo el verano?

Okey, me callo un rato, ¡pero es que en días me voy del maldito país y estoy demasiado emocionado!