El Príncipe •GuapoDuo•

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El calor en mi cuerpo interrumpió mis dulces sueños, pues como no tener calor si prácticamente Cellbit estaba encima mio abrazandome

No se en que momento llegamos a esta posición, se supone que el que lo estaba abrazando era yo a el

— Cellbo.. — Deje un corto beso en sus labios

El caballero solo hizo un bajo ruido entre sus sueños

— Mi amor es hora de despertar

Aun adormilado se levantó sentándose en la cama

— ¿Como amaneciste Guapito? — Me abrazo por la cintura dejando besos en mi cuello labios

— Muy bien Cellbo, gracias por domir conmigo estar junto a ti me relajo mucho

— Siempre que me necesites estaré junto a ti mi amor ¿de acuerdo? — Tomó suavemente mis mejillas y me beso

Estos momentos eran mágicos para mi, Cellbit era mi medicina, mi lugar seguro y la persona que necesitaba para no derrumbarme

Sin Cellbit en estos momentos no sabría que hacer

Sentía tanta presión sobre mi padre y aunque sabia que no podía hacer tanto al respecto quería imaginar que pronto este tema se solucionará

Tenía tanto miedo de separarme de Cellbit pero a la vez tenía miedo de que el problema con mi padre incrementará. No sabían que hacer  para tener paz

Al parecer mi rostro demostro lo atormentados que estaban mis pensamientos, pero yo estaba bien así que rápidamente cambie a una expresión más tranquila

Yo estaba bien y Cellbit no debería de preocuparse por mi

— ¿Has estado bien? — Me miro con preocupación, ¿que estaba mal? ¿Por qué se veía preocupado?

— Si Cellbo ¿porque preguntas? — Estaba confundido según yo estaba bien

— Estos días te he visto muy alterado, un poco más desanimado y mas pálido — Dijo aún con su mirada de preocupación que me ponía cada vez más nervioso — Todo lo que ha pasado con tu padre te esta afectando mi amor, y yo no sé qué hacer para que te sientas mejor

— No te preocupes por mi Cellbo, yo estoy bien y si todo este tema de mi padre no me tiene del todo bien pero con que este junto a ti todo eso se me quita — Le di un pequeño beso para tratar de tranquilizarlo

— Pero necesitas estar bien conmigo o sin mi,  Guapito no estas bien y eso me preocupa demasiado

— Estoy bien Cellbo — Volví a repetir

— No lo estas, ¿podemos hablar un poco sobre eso? Sabes que estoy aquí para escuchar todo lo que quieras decir

— No podemos hablar de eso porque no hay ningún problema ¿esta bien? — Me sentia presionado

— Por favor mi amor quiero que estés bien — Tomó mis manos

— Estoy bien Cellbit — Repetí queriendo terminar con este tema

— Sabes que estoy aquí para- — Me frustre de que siga insistiendo con ese tema

— ¡Que estoy bien Cellbit deja de molestar con ese tema! — Lo interrumpi mientras alejaba mis manos — Estoy bien — Sin saber que más decir me levante de mi cama y camine hacia el baño tratando de no mirar a Cellbit

Me recargue en la puerta del baño tratando de tranquilizarme, no puedo creer que le grite a Cellbite siento tan mal

Unos cuantos minutos después sali lentamente del baño decidido a disculparme con mi novio pero me senti fatal al ya no verlo en la cama

Supuse que ya debía de irse a hacer su trabajo así ignorando todo lo que había pasado hice mi rutina como todas las mañanas

Baje al comedor donde ya me esperaba mi familia para tomar el desayuno

— Buenos días — Salude como era costumbre y comí mi desayuno en silencio

— Roier hoy irás conmigo a unas juntas así que terminando de desayunar ve a que te pongan tu traje más formal — Ordenó el rey

— Si Padre — Respondi sin dejar de mirar el plato de desayuno

Mire de reojo a mis Padres, se tan veían serios ya no habian miradas de amor

Ya nada era como antes, antes siempre teníamos un tema de que hablar, lo que nunca faltaba en la mesa era comunicación y alegría

Pero ahora cada quien está por su lado y todo es por mi culpa...

— Padre.. Cuando regreses con mi hermano ¿podemos salir todos juntos a algún lugar? Hace tiempo que no salimos — Escuchar la ahora timida voz de mi hermana me partió el corazón

— Ya veremos Leonarda, Roier debe aprender a ser un buen futuro rey asi que tal vez tardemos un poco — Respondió el monarca y mi hermanita solo hizo un bajo reunido de aceptación

Minutos después terminamos de desayunar y justo algunos empleados fui a mi habitación para cambiarme de traje

— ¿Le gusta este traje? — Pregunto un señor con un traje blanco y dorado en brazos

— No, prefiero este — Señale si cualquiera, realmente no me importaba tanto

— Como ordene príncipe — Ya decidido me cambiaron y arreglaron

Mientras bajaba las escaleras del Castillo me fui preparando mentalmente para lo que sea que pase hoy

Y también me estaba preparando para ser el nuevo títere de mi Padre  porque sabía que al cruzar la puerta del Castillo dejaria de ser yo

Ahora sería quien debería de ser desde un principio...

El Príncipe

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