Unconditionally ||L.S||

6

Louis se encontraba sentado frente al gran ventanal, admirando el precioso jardín que tenía el mugroso hospital, habían pasado dos semanas exactas desde que estaba metido ahí, y aunque lo trataban mejor que en su casa, aun así no quería estar ahí. Su madre no había aparecido a verlo nunca, y tampoco ninguna de sus pequeñas hermanas ¿Pequeñas hermanas? Pequeñas zorras, ni una llamada, nada, no eran capaz de mover un dedo por él, aunque no era de sorprenderse, ni siquiera cuando lloraba en casa alguna era capaz de acercarse a él. ¿Lo iba a ser ahora? 

Te creía más inteligente se dijo así mismo, tenía que dejar de esperar que un día apareciera su madre con los brazos abiertos pidiendo su perdón, por favor, eso nunca iba a suceder.

"¿Quién soy?" se sorprendió al sentir unas frías manos taparle los ojos. Louis rio, esas manos las conocía bien, además, eran las únicas que conocía que siempre tenían aroma a chocolate.

"Hmm" dudo Louis "Un pequeño holandés teñido" Niall saco sus manos ofendido, mientras Louis reía.

"¡Que no soy teñido!" bufo Niall, sentándose al lado de Louis.

"Te creo Niall, te creo" Niall estuvo con el todo este tiempo,  aunque al principio Louis había sido un maldito malagradecido, Niall estaba siempre sobre él, pero, tenía sus razones;

  "¡Basta!" le grito Louis mientras caminaba rápido a su habitación.

 "Hmm" murmuro Niall ignorándolo.

"¡Deja seguirme, deja cuidarme tanto, basta!"

"¡No, maldita sea! ¡No voy a cometer un mismo error!" Louis se hizo pequeño ante el grito de Niall, él nunca le había gritado.

"¿El mismo error?" se atrevió a preguntar. Niall lo miro a los ojos, profundamente preguntándose si contarle o no.

"Mi hermano" se rindió al final "Mi hermano era igual que tú, cortes diarios, días sin comer, una depresión que lo absorbía, y yo-" Niall sollozo, recordando eso que lo lastimaba tanto, esa culpa que cargaba todo los días.

"Si no quieres, no me-" trato de calmarlo Louis, pero Niall lo interrumpió.

"Si quiero, necesito contárselo a alguien" limpio las lágrimas que tenía en sus mejillas "Él estaba mal, y yo no hacía nada, simplemente lo miraba consumirse solo, y no hice nada, y un día llegue a casa, mis padres no estaban, subí a mi habitación, y ahí estaba el sin vida, se había cortado las venas, se había cansado de vivir, y no pude hacer nada, y nunca me voy a perdonar por dejarlo solo" Niall lloro, y estaba vez fue Louis quien lo sostuvo.

Y desde ese día, eran como hermanos, Niall estaba casi todo el tiempo con él, animándolo, molestándolo, pero siempre acompañándolo en el amargo camino que está recorriendo.

"Hoy es mi día libre, me vengo a despedir" dijo Niall "¿Estarás bien?"