Lovesick

Desesperación.

Lo primero que recuerdo al despertar era ese sabor metálico en mi boca, sangre, mis ojos se sentían pesados, no podía abrirlos con facilidad, mi cuerpo estaba agotado y sin duda herido por no decir destrozado. Parpadee un par de veces mas para terminar de acostumbrar a mis ojos a la oscuridad del lugar, podía sentir la tierra en mis manos ¿Estaba bajo tierra? ¿En una cueva? ¿Donde estoy? ¿Qué pasó? Había demasiadas preguntas por responder y no sé si tenía el lujo de darme el tiempo para estar en busca de dichas respuestas, tenía que moverme y rápido ya que estaba herido y eso quiere decir que cerca debe haber algún enemigo. Logré incorporarme lentamente y empece a caminar en dirección hacía un pequeño ruido que escuchaba frente a mi, no era muy inteligente de mi parte ya que no sabía que me podría encontrar pero había algo en ese ruido que me decía que debía ir, apoye mi mano contra esa pared de tierra y rocas que tenía al lado para evitar caer al suelo, me costaba moverme por el dolor en mi cuerpo, tendría algunos huesos rotos y el hombro derecho posiblemente dislocado, también podía sentir como la sangre bajaba por un costado de mi frente siguiendo por mis mejillas para terminar en mi cuello manchando mi camisa en el proceso, entre mas me acerco al ruido mas débil me siento.

Una luz me desconcertó por completo haciéndome caer de rodillas al suelo, pude sentir algo similar a concreto y abriendo un poco los ojos me percaté que era parte de un piso totalmente destruido, el diseño me parecía familiar pero no podía ubicar en donde exactamente lo había visto, a lo lejos podía escuchar voces pero no podía distinguir de quienes eran y sin darme si quiera la oportunidad de volver a incorporarme, mi cuero terminó por colapsar y me desplome en el piso, podía sentir como perdía mis sentidos poco a poco, siendo el ultimo el de la audición y gracias a eso pude escuchar el primer sonido que llamó mi atención, era un quejido.

¿Estoy muriendo?

Desperté casi saltando de la cama con mi cuerpo totalmente bañando en sudor frío, me dolía la cabeza y me sentía desorientado, ya había pasado una semana desde aquel incidente y mi herida estaba completamente cerrada, pero llevaba ya tres días soñando exactamente lo mismo, incluso los mas ínfimos detalles eran iguales, nada cambiaba, nunca podía llegar al origen del sonido, nunca podía saber de quienes eran las voces que se escuchaban a lo lejos. Lo que si era evidente es que mis heridas eran el resultado de una batalla bastante arriesgada, mi contrincante definitivamente buscaba eliminarme por completo, - Es un lugar con tierra...podría ser en cualquier parte. Me dije en un susurro. Estaba al borde del colapso mental por el aburrimiento, Pai aun insistía en que debía descansar mas tiempo pero por el bien de mi salud mental tenía que dejar mi habitación, se supone que nuestra misión no debía tardar tanto así que nuestros dormitorios no tenían la gran cosa, solo lo básico, una cama, un placard y el baño. Las otras habitaciones como el laboratorio, la sala de entrenamiento, la armería y cocina si estaban mas equipadas, así que me era casi imposible no aburrirme como un hongo encerrado en esas cuatro paredes. - ¿A quién quiero engañar? Lo que realmente me tiene aburrido es no poder verla... Ichigo. - 

Me di un baño rápido para luego teletransportarme cerca del café para ver si por ahí estaba Ichigo pero no lo suficientemente cerca como para que ese peluche rosado chismoso me detectara, quería asustarla solo un poco para después molestarla, ya que sin duda algo que amo mas que verla es ver cada una de sus facetas, asustada, molesta, con dolor, aterrada, esperanzada, frustrada. De solo recordar sus expresiones un escalofrió recorre mi cuerpo de forma violenta, suelto un suspiro pesado  al sentir como la sangre empieza a subir por mis mejillas y por otras zonas de mi cuerpo, este es el gran efecto que tiene si quiera el imaginarme a Ichigo, en la pelea todo se vuelve mucho mas excitante al tener un contacto cercano con ella llegando al punto en donde puedo oler su perfume mezclado con el sudor y la sangre, creando así un olor mas que exquisito, muchas veces debo contenerme para no terminar todo demasiado rápido. Mi corazón dio un pequeño salto cuando la vi salir del café con su uniforme del secundario, se ve tan linda, me dispuse a seguirla desde el cielo a una distancia prudente, sin perderla de vista pero permaneciendo oculto... fue una sorpresa para mi cuando vi que no estaba tomando el camino de siempre a su casa, sino que estaba yendo al centro de la cuidad ¿Será que buscará restos de Mew Aqua?  Si es así entonces es mi día de suerte ya que esta yendo sola, la tendría para mi diversión sin que nadie al rededor empiece a entorpecer nuestra improvisada cita. Ella estaba caminando realmente rápido, incluso tropezó con unas cuentas personas cuando se estaba adentrando al la cuidad, por un momento pensé que se vería con el imbécil y patético de Aoyama, pero ese pensamiento se esfumo por completo de mi mente en cuando la vi doblar hacía un callejón bastante oscuro y solo, si conozco bien a mi gatita como realmente lo hago puedo decir, que a ella le aterran los lugares oscuros y solitarios... así que sí, Esta buscando Mew Aqua...- dije para mi mismo con voz temblorosa, podía sentir escalofríos, mi corazón acelerarse, un calor esparciéndose por todo mi cuerpo, podía jurar que en vez de invierno estábamos en verano por el calor que sentía en mi.