Para Danielle, Kang Haerin es la obra de arte más hermosa y digna de apreciar en el mundo entero, de pies a cabeza, ella es simplemente perfecta e intocable, como un hermoso diamante que debe ser cuidado con cautela y amado por su gran valor.
Desde sus rojos labios a los que adora besar, hasta los dedos de sus manos que ama entrelazar con los propios. Haerin es su perfecta obra de arte, creada con todo el esmero del universo y merecedora de un gran trono por ser la reina de su corazón.
A veces siente que Haerin es demasiado para ella, pero cuando esos pensamientos la atacan, la menor siempre está ahí para dejarle en claro que no es así. Haerin es su salvación, su refugio.
A la menor le gusta visitar museos para aprender y observar las distintas obras y mentes de otros seres humanos, plasmadas en un lienzo o una escultura. Aunque Danielle prefiere simplemente admirar la belleza de Haerin en silencio, podrían haber miles de obras reconocidas a nivel mundial, pero a ella sólo le importaba una.
－Eres una obra de arte, Haerin －Dice.
－ Estás rodeada de miles de ellas, Danielle.
Pero ninguna es como tú, perfecta y angelical en todos los sentidos, ningún artista podría imitar una obra maestra como lo era Haerin.
Ninguna nunca podría darle esa paz y nostalgia que sentía cuando fijaba su mirada en su novia. Con sólo mirarla todo a su alrededor desaparecía y era simplemente algo material, en cambio, Haerin era amor. Era su cariñito.
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mi cariño
Fanfictioncariño eres un amor. donde haerin es el precioso cariño de danielle. queda prohibida su copia o adaptación sin mi autorización.
