gummy smile〈 taesan x leehan 〉

O6

el festival de inglés era algo en lo que taesan jamás iba a pensar estar involucrado. él no era precisamente un as en tal idioma, recordando a la vergonzosa situación en la que se había visto envuelto en aquella clase donde demostró sus nefastas habilidades para ello ante leehan, jamás imaginó que iba a "participar" en él.

"participar", entre comillas, pues él no participaría en las muestras de talento. ni en el baile, ni en el canto, ni tocando algún instrumento musical.

debido a que el profesor encargado de la actividad había encontrado correcto modificarla un poco haciéndola más interactiva e interesante, había decidido agregar también puestos con temáticas de países, donde los estudiantes tendrían que explicar la cultura de ellos.

eso involucraba, por supuesto, disfrazarse. taesan no podría explicar la extraña sensación en sus piernas descubiertas con el tibio viento del día. él estaba utilizando una falda —irlandesa, pues era aquel país al que su grupo había sido asignado—, y se habría sentido avergonzado de usarla de no ser porque woonhak también lo hacía, y al moverse enérgicamente acaparaba toda la atención del resto de alumnos en el patio, permitiéndole pasar desapercibido.

—bonitas piernas, taesan —bromeó riwoo llegando junto a taesan, carcajeándose como ya era común en él mientras le observaba de pies a cabeza—. jamás imaginé que te bajarías a tal nivel.

—todo sea por la calificación, la necesito para aprobar. no es placentero para mí estar aquí —dijo como defensa, sintiendo sus mejillas ruborizarse por la vergüenza. taesan se avergonzaba fácilmente, más ante alguien como riwoo al que cada cosa le parecía divertida.

—sí, bueno. woonhak a diferencia de ti está disfrutando bastante la atención —y era cierto, su amigo kim amaba llamar la atención, aunque no por creerse más que el resto o mucho menos, el chico simplemente disfrutaba de hacer sonreír a los demás, de alegrar un día. kim woonhak tenía ese corazón de oro. asintió—. bueno, al menos no eres el único que se siente raro. estoy seguro de eso.

justo cuando taesan iba a preguntar por qué, riwoo señaló un poco más allá de donde se encontraban; entonces, al concentrarse un poco más por distinguir de quien se trataba, diferenció la silueta de leehan que vestía un yukata rosa, con estampado de flores de cerezo, muy lindo y que, a su parecer, combinaba totalmente con su color pálido de piel.

su corazón latió emocionado al verle el rostro; sus mejillas rosadas por la vergüenza le hacían ver, incluso, más lindo de lo que ya era. taesan tuvo que reprimir un chillido emocionado al ver, también, los adornos con forma de flor que llevaba en su cabello. leehan se veía hermoso, completamente, y riwoo sabía que era eso lo que taesan estaba pensando. lo leía de sus ojos.

—perdió una apuesta contra mí, así que lo mandé a disfrazarse para el festival. ¿verdad que se ve lindo? —preguntó, incluso sabiendo la respuesta. taesan asintió bobamente—. ya le he tomado fotografías, más tarde te las enviaré ¿qué te parece?

si hubiera podido decir algo, seguramente sus primeras palabras hubieran sido 'muchas gracias, riwoo', pero se petrificó al notar que leehan se dirigía hacia ellos, caminando entre estudiantes con la mirada en el suelo y las mejillas a tope de rosa.

—¡te dije que no me dejaras solo! ¿¡dónde estabas!? ¡regresa a tu puesto inmediatamente! ¡no quiero estar en esta mierda solo! —exclamó en cuanto estuvo de pie frente a riwoo. taesan apenas lo había notado en aquel momento, pero riwoo vestía también un trate tradicional de japón, aunque no era un yukata sino un kimono, que hacía lucir en extremo sus hombros anchos y su cintura pequeña.

—sí, sí. vamos. no es necesario que grites —se giró a taesan, despidiéndose con la mano—. más tarde seguimos hablando, ¿está bien? ¡ven y pásate también por nuestro puesto, si gustas!

—está bien, ¡suerte! —se despidió y los dos chicos comenzaron a caminar alejándose de él, pero entonces leehan se detuvo de golpe, como si hubiera recordado algo, y giró hacia taesan.

—oye... cuando esto termine, necesito decirte algo... ¿podrías esperarme para regresar contigo a la estación? —taesan intentó no mostrar su sorpresa. habían caminado juntos hacia la estación veces anteriores, pero debido a que se encontraban casualmente por el camino. leehan jamás se lo había pedido directamente.

—yo... eh... sí, claro —dijo, sonriendo suavemente mientras intentaba aparentar normalidad y no lo mucho que se había emocionado con la idea de pasar, aunque fueran unos pocos minutos, con la compañía de leehan.

historia de @__luminiscencia
adaptación por @tulinextdoor