Tres padres vs un niño | Supernatural | Spanking

Cacería

- Jack, te quedarás aquí en el bunker, trata de aprender del mundo afuera mientras no estamos. - le dice Cas.

- Pero yo quiero ir con ustedes. - dice con el ceño fruncido en clara disconformidad.

- Jack, ya lo hablamos. - dice Dean. - No más cacerías hasta que termine tu castigo y aprendas a no desobedecer.

- Pero yo quiero ir. - Jack estaba a punto de llorar y las ganas de hacer una rabieta no le faltaban. - Cas... - Castiel niega, ya que no quiere pasar sobre la autoridad de Dean. - Sam... - Sam también niega. - Dean, por favor, quiero ir.

- Ya he dicho que no, aprovecha de reflexionar sobre tus actos. - le besa la frente y sale del bunker.

Jack se queda en completo silencio y deja salir las lágrimas que tanto deseaba soltar. Una vez que se calma se pone a pensar abre su laptop y ve un mensaje de sus amigos.

Ryan: "Hola Jack, hoy a las 15.00 en la salida del pueblo, ¿Qué te parece?"

Jack: "Buena idea, nos vemos"

Jack se alistó para salir con sus amigos, lo dicho por sus padres poca mella hizo en él. Jack se consideraba lo suficientemente mayor para hacer lo que quisiera y él quería salir con sus amigos, les gustara o no a sus padres. Además pensaba llegar antes que sus padres y estaba seguro que solo llegar de la cacería le quitarían su castigo.

Con ese pensamiento salió del bunker y caminó a la cuidad hasta llegar a la entrada, que para los demás era la salida.

A lo lejos divisó un grupo de jóvenes de veinte años más menos, eran sus amigos.

- Hola Jack. ¿Qué tal?

- Hola Ryan, bien. ¿Qué hacen?

- Nos relajamos. - dice sacando un cigarro de su bolsillo. - ¿Quieres?

Jack no quería, sabía que si sus padres se enteran, estaría en graves problemas, pero no quería parecer un niño frente a sus amigos.

- Si. - responde tomando el cigarro.

Lo intenta prender pero falla. Ryan al verlo intentar lo mira de forma burlesca.

- Pareciera que nunca has fumado. - toma el cigarro de Jack, lo pone en sus labios y lo enciende para darle una calada. - Ten. - Jack se sonroja debido a que se vio descubierto.

- Gracias. - acerca el cigarro y le da una calada que lo deja tosiendo. Ryan lo miraba burlesco, le parecía un niño bastante adorable.

- Ey, chico, con calma. - dice una chica pelinegra con mechas en rosa.

- Estoy bien. - dice, aunque le ardía la tráquea y tenía los ojos aguados. Después de eso se terminó el cigarro sin problemas.

- Por cierto, iremos a tomar algo con Dana y Travis. - eran los chicos con los que andaba, los cuales daba la impresión que eran pareja. - ¿Vienes?

- Claro.

Van a uno de los tantos bares de la ciudad y haciendo uso de su identificación falsa (hecha por Sam para las cacerías) entra sin ningún problema.

Se sientan en una mesa apartada y Jack al no saber beber, pide lo mismo que sus acompañantes. Lo que no sabe Jack es que su resistencia al alcohol es cero y con dos cortos de Vodka, queda viendo burros verdes.

Ryan, al verlo, se compadece y decide llevarlo a su casa. Se sorprende al ver el bunker.

- Tu casa parece base militar. - dice Ryan a un borracho Jack.

- Mis padres me van a matar. - dice entre murmullos Jack.

Ryan en todo el trayecto a la casa de Jack, se dio cuenta que era muy diferente a él, ya que entre su borrachera le contó que tenía tres padres y que estaba castigado. Ryan se compadeció de Jack al saber que este se había escapado de casa y que sus padres probablemente estarían furiosos.

- Pues es tu culpa y ahora yo estoy en problemas. - Ryan quería salir corriendo del miedo de encontrarse a los padres de Jack, pero en el estado que iba Jack es probable que antes de llegar a su casa se desmaye, y también sentía un poco de culpa.

Tocó la puerta con la mano tiritando y en eso Jack le pasa una llave.

Abre el bunker, baja las escaleras y queda sorprendido por el interior, que parece sacado de una serie de los 50, lo dejó en un sofá en que había en la sala y al darse la vuelta para salir, se encuentra con una de sus más grandes pesadillas...