One-shots y susurros eróticos de Loki acompañados de imágenes, no necesita más descripción.
Todos los protagonistas que tienen sexo son mayores de edad.
Si eres sensible ante estos temas, abstente de seguir leyendo.
Era una noche de fiesta y celebración en Asgard además, vendrían invitados de Vanaheim, el reino aliado de mi padre. Me puse mis mejores galas para la fiesta, un nuevo traje de cuero en verde y una nueva armadura dorada resplandeciente. Ya casi estaba listo, sólo debía peinarme. En un principio pensé en llevar mi cabello hacia atrás, como siempre, pero me gustó la forma de aquel rizo negro sobre mis ojos, por lo que decidí llevarlo al natural finalmente.
Cuando llegué al banquete mis padres y hermano ya me esperaban y mi padre me lanzó una mirada de reproche, pero no me importó, me senté al lado de mi madre y esperé a que mi padre diera su discurso alabando la alianza de tantos años con Vanaheim. Después de su discurso, comenzó el banquete y mis ojos se fueron directos a la mesa de las damas de Vanaheim, donde una de ellas llamó poderosamente mi atención.
Tomé un sorbo de mi vino sin apartar mi mirada de ella, la cual estaba hablando y comiendo animadamente con las que serían sus amigas. Su traje era hermoso y de buena calidad, al igual que la joyería que llevaba, por lo que pude suponer que era una chica de alta cuna, aunque no fue eso lo que llamó mi atención de ella, sino su sonrisa y los hoyuelos que se le formaban al reír.
Lo tuve claro, esa noche ella sería mía.
El banquete terminó y los sirvientes retiraron las mesas del salón para dar paso al que sería el gran baile, todo el mundo estaba esperando eso, especialmente yo, que me acerqué lentamente a aquella joven por detrás y, cuando la música comenzó a sonar, la tome por la cintura y me situé frente a ella.
—¿Me harías el honor de concederme el primer baile, hermosa dama? —le dije haciendo una inclinación y besando su mano mientras mi mirada permanecía clavada en sus ojos.
—Será un placer —me dijo ella con esa sonrisa que me encantaba.
La llevé hasta el centro del salón y ambos comenzamos a bailar con los cuerpos muy pegados, tal y como lo exigía aquel paso de baile.
—Mi nombre es Loki Odinson. ¿Y tú cómo te llamas, hermosa dama? —le pregunté mientras mi mano se aferraba a su cintura.
—___________ —me dijo ella.
—Bonito nombre, tan bonito como tú. ¿No serás hija de Freyja por casualidad?
—No —me dijo ella sonrojada—. Pero sí que somos familia cercana.
—Con razón su belleza no le hace justicia a la tuya.
_________ volvió a sonrojarse a pesar de darme la impresión de que no era una chica tímida, pero yo solía tener ese efecto en la gente, solía seducir con facilidad a quien me propusiera.
