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Klaus :
¿Quien es este tipo, Don Safari? -pregunté sarcásticamente en el cuerpo en el cual me había cambiado- Vale ¿mal o peor? -le pregunté enseñado la ropa a Katerina la cual había secuestrado-
Los tonos oscuros te sientan mejor -me respondió ella-
Gracias, querida -le dije irónicamente- Vale, examen sorpresa, la daga y la ceniza las tienen los Salvatore ¿correcto? -le pregunté a Katerina mientras me ponía la chaqueta negra-
Usaron la daga para matar a Elijah, está en el sótano de los Salvatore -me respondió-
Bien, esa daga debe quedarse exactamente donde está, lo último que necesito es resucitar a Elijah, es un aguafiestas -dije-
Y no olvides que lo has dejado con tu novia Jenna -me recordó Katerina-
Cierto, la tía de Elena, por las mentiras sobre Isobel ¿que más? -le pregunté-
Eso es todo -me acerqué a ella y le acaricie su pelo y se asustó-
Desconfiada...-le dije y aparte mi mano-
Porfavor, mátame, ya te he dicho lo que se -me suplico asustada-
Creo que eso es lo que crees, pero...¿que es lo que no sabes? ¿Que podrían estar ocultándote? ¿Algo más?-le pregunté mientras me acercaba- Cuéntame -le obligué con la compulsión-
Indagaron si Bonnie podía encontrar la forma de matar a un original sin la daga -me contó Katerina-
¿Bonnie, la amiga del alma? -le pregunté y ella asintió- pero has dicho que había perdido sus poderes -le dije seriamente-
No los tiene, o no los tenia, no lo sé, me has secuestrado ¿recuerdas? estoy fuera de juego -me respondió ella-
Bien, tendremos que llegar al fondo de esto -le comente-
Mátame, Klaus y acaba con esto -me decía ella-
¿Y ser benevolente? Llevo buscándote más de 500 años, tú muerte durará al menos la mitad de ese tiempo -le miraba con una sonrisa y ella me miraba con miedo y saqué una navaja- quiero que cojas esta navaja y te la claves -le dije y se la entregue y la cogía con miedo y se la clavó en la pierna y se quejó- Ahora sácala -y la sacó- Mientras este fuera, quiero que lo repitas una y otra y otra vez y si te aburres cambia de pierna -le dije divertido-
¿A donde vas? -me preguntó y me agaché-
A echarle un vistazo a mi preciosa réplica-le dije y le di un beso en la frente a Katerina- No te desanimes Katerina -le alce la barbilla- la diversión acaba de empezar, otra vez -y me fui del sitio-
