Kasai era un joven quien estaba muy solo, muchas personas le tenían miedo a sus flamas ya que el no sabía controlarlas, se dejaba llevar por las emociones lo cual era un problema para él ya que al mas mínimo cambio en su animo este se reflejaba en su fuego, así que lo que hizo fue reprimir sus sentimientos para no causarle problemas a los demas Dioses. A pesar de todo Kasai aun así seguía su vida tranquilo y hacia sus labores como Dios cada día, aunque no le gustaba mucho su poder debido a que gran parte del tiempo el fuego traía desgracias y tragedias a la Tierra, aun así el seguía con su deber ya que no podía cambiar su forma de ser.
Todo su mundo había cambiado gracias a una Diosa, la cual conocio de una manera muy tonta, ambos sumergidos en sus mentes sin darse cuenta de su exterior se tropiezan haciendose daño, Kasai se da cuenta de que había chocado contra Mizu la Diosa del agua. Kasai estaba sorprendido ya que jamas había visto a una Diosa tan linda y tierna pero también se percató que la había quemado y eso lo asustó, lo cual lo hizo alejarse de ella rápidamente y sin siquiera pedirle disculpas. Nervioso Kasai siguio su camino sin voltear atras, el pobre no podía controlar su fuego.
Kasai había intentado olvidar ese encuentro con Mizu pero no lo lograba, incluso notaba cuando Mizu lo miraba a veces desde lejos, era una Diosa muy torpe y eso le parecía tierno a Kasai. A Kasai le parecía extraño que una Diosa se hubiese interesado en el, no encontraba ninguna virtud en si mismo ya que después de todo el se veía a si mismo como un Dios malvado. Mizu había intentado acercarse a el muchísimas veces pero Kasai solo se alejaba de ella, no quería lastimar a la única persona que había mostrado tanto interés en el. Su decisión lo puso muy triste, ya sus llamas no tenían la misma fuerza de antes pero en el fondo sabía que estaba haciendo lo correcto porque protegía a Mizu, ahí es cuando se dio cuenta de lo mucho que Mizu había llegado a significar para el aun así cuando no se conocían casi.
Paso el tiempo y Kasai había madurado, ya tenia control absoluto de sus llamas pero no había vuelto a ver a Mizu desde ese entonces, no pudo evitar entristecerse pero al encontrarse con Mizu otra vez, decide ir hacia a ella y agarrarla de la mano, existía el riesgo de quemarla pero quería hacerlo, porque sí no lo hacia el se arrepentiria toda su vida. Al hacerlo Kasai ve la sorpresa en los ojos de Mizu y el también estaba sorprendido, no le había hecho daño y la emoción que ambos sentían era visible, sin darse cuenta Kasai le dice:
-¡Mizu!...creo que me enamoré de ti
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Limerencia
Короткий рассказ¿Qué harías si no pudieras tocar a la persona de quien estas enamorada/o? ¿Sí tu simple forma ser le hace daño? Esta es la historia de Kasai y Mizu, dos seres muy opuestos alejados por como son pero atraídos por un amor que parece imposible.