El nombre de Primrose Everdeen vuela en el aire, las palabras de Effie han desmoronado al Distrito 12. No se escucha nada, sólo silencio cargado de anhelo a la pequeña Prim. Esa que cantaba por la pradera con sus rechonchas piernas de bebé. Esa que bailaba en la plaza. Esa que morirá en los Juegos del Hambre. Mi hermana, Prim, mi única compañía desde que mi padre murio, la perdí, no volverá.
Effie pasa a decir el nombre del tributo masculino y sale Peeta Mellarck. La verdad es que no me importa quien sea, mi hermana Prim no volverá al Distrito 12. Morirá en público, todo Panem la verá. Antes de poder ponerme a llorar escuchó la voz de un chico que se presenta voluntario. Y pienso quien será tan estupido como para hacer eso. Y me percató cuidadosamente y lo entiendo todo, Gale seria tan estupido. Le veo subir las escaleras con la espalda erguida y los hombros agachados, como si en cada paso le pesaran los músculos. Cuando llega al palco mueve los labios suavemente y dice: 'Gale Hawthorne, voluntario como tributo masculino.' Y ahí los tengo a los dos, a mi hermana y a mi mejor amigo en el palco, destino de una muerte segura. Hasta que alcanzó a reconocer que Gale sólo se presentaría voluntario para una cosa: salvar a Prim. El siempre ha sido así. Y recitó en mi cabeza las palabras de Effie: 'Y que la suerte, este siempre de vuestra parte.'
