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—Ya te lo dije, Yoongi, es estúpido lo que dices.

—Vamos, Hoseok es lindo.

—Es un maldito niño, a parte, ya te dije qué haré con él.

—Ah... te diré una cosa, eso le hará mucho daño, Taehyung, no vale la pena arruinar a otro sólo por venganza.

—Lo vale... bastante de hecho, esto es sólo como una pequeña advertencia para Jungkook de lo que soy capaz de hacer si me provoca, dejó de ser mi amigo en el momento mismo que defendió a Hoseok.

—Estás creando un odio demasiado grande hacia Jungkook y eso no está nada bien.

—Él se lo buscó. —, el timbre sonó, Taehyung dejó su copa de vino encima de la mesa para así ver que era Hoseok y entonces colgó de golpe para ir a abrir la puerta.

—Buenas tardes, Taehyung, sólo tengo veinte minutos, por favor, dime lo que me querías decir.

—¿Acaso Jungkook te controla?

—No... no es eso, sólo que no quiere que esté cerca tuyo.

—¿Eso te dijo?

—Por favor, dime lo que querías decirme.

—Entra.—, Hoseok asintió para después pasar viendo el hermoso lugar, la casa era enorme, ¿de dónde sacaban tanto dinero para construir casas de tal magnitudes?

—Adelante, toma asiento. —, Hoseok hizo lo que Taehyung dijo y unos segundos después Taehyung se sentó a su lado con dos copas de vino en la mano.

—Tu casa es muy bonita... —, Hoseok juntó sus piernas lo más que pudo, Taehyung sonrió al darse cuenta de cuán tímido era Hoseok.

—Estaba pensando en que me ayudes a hacer las pases con Jungkook, él no quiere hablarme, tampoco saber de mí, básicamente, me odia, me odia y mucho y tú eres mi vía a él.

—¿Quieres que yo... le hable?

—¿Hablar?, no, eso no sirve con él, por más que no lo parezca, es muy arrogante y egocéntrico, no te hará caso.

—Pero si yo... le hablo, él capaz, sí él se entera que hablamos y me trataste bien él me hará caso.

—¿Tratarte bien?, sólo es interés, no tengo intenciones de ser amable contigo ni que formemos un lazo hermoso y único, no, sólo es interés.

—Aún así... si él se entera que hablamos bien... lo pensará.

—No, no lo hará, lo conozco demasiado bien, tú me ayudarás, ¿no le dirás nada de lo que ocurrió aquí, no? —, Taehyung se acercó a Hoseok invadiendo su espacio personal.

—N-no... yo... yo no diré nada, tranquilo. —, Taehyung miró los labios ajenos para después a él, Hoseok sería su mayor vía de venganza para Jungkook, haría que el odio ajeno crezca tanto por Hoseok a tal punto que lo bote de su casa.

Haría que Jungkook odie con toda su alma a Hoseok hasta el punto de que no lo puede ni siquiera mirar, no lo hacía para volver a hablar con Jungkook, lo hacía por morbo.

—Bien, ya que no dirás nada... ¿bebes?

—No, aún soy mejor...

—Tienes diecisiete años, Hoseok.

—Aún así...

—Sólo un poco, la bebida no tiene nada, sólo bebe, es muy dulce. —, Hoseok se quedó pensando unos segundos para después darle un sorbo, sí, era muy dulce, pero el sabor a alcohol era muy fuerte.

—Ya que quedamos en algo... que esto no salga de estas paredes, tú y yo jamás nos vimos. —, posó su mano por el rostro ajeno desconcertando a Hoseok por el acto quién inmediatamente se puso rojo y se hizo visible.

—Ahora ve, Jungkook ha de estar esperando por ti, quiero que vengas mañana, ¿qué dices?

—U-uhm, sí, sí, vendré. —, se alejó del toque para después retirarse rápidamente haciendo que Taehyung ría con burla al ver cuán estúpido era el chico.

Del odio al amor. [Vhope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora