Relato 1

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Relato por Willy:



-Y recuerda hijo, sé amable con todos tus profesores y compañeros, no olvides tus cuadernos en el salón, no te agites mucho, has los ejercicios que te diga el profesor...- Hablaba y hablaba mi madre como si no hubiese un mañana.


-Ya, mamá. Tranquila, ¿sí? Estaré bien, no te preocupes demasiado que no soy un niño.- Dije para relajarla y callarla, que me estaba mareando. Suspiró algo intranquila y me miró, arreglándome el cabello un poco y sonriéndome levemente.


-Cuídate. Estate atento al móvil por si te llamo.- Me dio un beso en la mejilla y me estiró un poco la camiseta por la altura del pecho.


-Claro, no te preocupes de más. Bueno, me voy, que se me hará tarde.- Le devolví el beso y salí por la puerta principal, caminando hacia la parada de autobús y esperar a que uno pasara. Me coloqué los audífonos y puse un poco de música en el móvil, tratando de reprimir los nervios del típico chico nuevo del curso, en una escuela desconocida y entrando a la secundaria. Noté que habían chicos y chicas de mi edad en la misma parada, con sus labios articulándose como si hablaran de algo. Yo, en cambio, me puse a un lado, algo nervioso pensando que podrían ser mis posibles compañeros de curso, moviendo un pie al son de la música y girando la mirada al otro lado de la calle. Pareció una eternidad hasta que pasó un transporte, al fin, y subiéndome en él. Sólo algunos subieron, como si los demás esperaran otro distinto. Caminé hasta un asiento vacío completamente y me senté al lado de la ventana, solo y mirando por ella, tratando de calmar los nervios. "Vamos, no te pongas así. No es primera vez que eres el nuevo de una escuela y lo sabes. Sólo... Relájate", me decía a mi mismo internamente sabiendo que, al fin y al cabo, no serviría de nada.


El trayecto fue bastante normal: parada tras parada, insultos entre conductores, un poco de tráfico... Típico cuando estás en una gran ciudad. Al llegar a la escuela, se vio el cómo hubo problemas para parar el autobús, puesto que estaban los padres de algunos estudiantes parados ahí, en sus coches, sin moverse en absoluto. Por fin, luego de un par de minutos parados ahí, estacionamos y bajamos, yendo a la entrada de la secundaria.


-Wow...- Me dije en voz baja al ver lo enorme que se veía el edificio principal de la escuela. Poco más y parecía escuela privada para niños y niñas hijitos de papá y mamá. Tenía un antejardín bastante amplio donde se adornaban bien cuidadas muchas flores de varios colores y una placa de concreto y piedras donde aparecía en enormes letras el nombre de la escuela: "Union Fort High School", justo al lado de un camino de adoquines simples que formaban un pequeño sendero hasta la entrada del lugar, pasando por unas escaleras.


-Bien, me dijeron que este lugar era enorme... Espero que sólo sea este edificio...- Me dije nervioso, emprendiendo camino hacia lo que era mi nuevo segundo hogar.


La cantidad de alumnos que seguían entrando era impresionante. Más y más caras que jamás en mi vida había visto y que posiblemente no volveré a ver dentro de mucho tiempo. Noté que todos salían por el otro extremo del edificio. "¿Acaso acá no están las aulas?" me dije internamente algo confundido. Me saqué los audífonos y me acerqué a un chico al azar. Era más alto que yo, delgado y con el cabello castaño medio claro.


-D-Disculpa.- Le toqué el hombro suavemente, a lo que se detuvo y se giró a verme. Era de piel clara y de ojos un poco verdes.

"Amor a la Primera Sonrisa" [Wigetta]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora