Crianza

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Su niñez, como no recordarla, a pesar de que fue hace siglos sigue fresca en su memoria


Fuera de lo que se piensa, fue de los hijos que "mejor les fue", su madre al ver el favoritismos de "el" siempre velo por su vivir, si bien toda su infancia se vio en vuelta en clases de etiqueta, historia, como ser una emperatriz ejemplar y demás como danza y destreza. Gracias a estas fue una mujer con modales impecables, una delicadeza casi perfecta y unos movimientos tan elegantes que al momento de moverse o caminar sus pasos no se escuchaban, aunque también se debió a su "habilidad" por así decirlo, la magia, podía flotar y moverse por el mundo cual sople de viento que lleva una frágil hoja gracias a esta, además de fabricar pociones y hechizos


Cuando creció lo primero que dudo en cuestionar a su madre es el por qué debía casarse con alguno de sus hermanos, ella cuando se lo dijo le recomendó a Ayato, a quien ya había empezado a educar, grande fui su desilusión cuando la pequeña prefirió a Kanato, con quién tenia una mayor relación


Siempre que podía descansar de sus estudios estaba con el, teniendo fiestas de te en las que ocasionalmente participaba su medio hermano menor Reiji, pero cuando Carmilla no hacía tiempo Kanato la acompañaba y cantaba para ella mientras estudiaba, lejos de lo que sus hermanos piensan, su amado Teddy fue obsequio de su hermana mayor en lugar de su madre


Costará creerlo, pero a pesar del favoritismo de su madre por ella, la odiaba, odiaba lo que le hacía a sus hermanos, como desmanteló y ensucio la pequeña mente de Laito al volverlo su amante (aunque Carmilla admitía no ser una santa y no tenia nada contra el incesto por obvias razones), como obligaba a Kanato a verlos mientras cantaba como castigo por haberle elegido y como siempre golpeaba a Ayato cada vez que no quería estudiar, aunque Carmilla admitía no ser una santa y no tenia nada contra el incesto por obvias razones 


No era tonta, sabía que simplemente se libraba gracias a qué su padre siempre la visitaba, pero por mucho que quisiera quejarse de ella sabía que el no haría nada, conocía su plan siendo tan solo una niña, sabía que ella era "Lilith" y el papel de peón que jugaba en esa partida de ajedrez que sería su vida, además que era obvio que el lo sabía, era el rey y sabía todo sobre todas las personas de su reino. Por lo que decidió sacar provecho, si quería vivir debía mover bien sus piezas, lo primero era aliarse con sus hermanos para matar a madre


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La siguiente vez que vino padre a visitarme lo vi fijo a los ojos y asentí. Me miró sorprendido pero enseguida empezó a reír

Eres tan particular, logras entender todo a tan corta edad —

Es lo que quieres después de todo, ¿no padre? —mi pregunta hizo centrar más su atención en la conversación— no la dejarías hacerle eso si no estuviera en sus planes

El sabía que hablaba de las infidelidades de una de sus esposas

Veo que lo sabes, ¿acaso harás algo para ponerte en contra de mis ideas? —su sonrisa fue perturbadora al momento de preguntar, sabía que no podría contra el, no por ahora—

Su verdadera majestadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora