Un libro sobre el amor
En el atardecer del campo
Miro mis ojos
Y digo que me amo
Quería que fuera cierto,
Creía hacerlo en vano,
A veces, muchas veces.
Vi tu alma.
En el amor de las palabras
En la vibra del habla.
En el encuentro de nuestras miradas.
Y me tomó sólo estar frente tuyo
Para saber que te sentía.
Incluso antes de encontrarnos
Incluso antes de sabernos.
Que nuestra esencia está destinada.
Es difícil, sanar , cuando sólo has aprendido a dañarte,
Es difícil amar, si nunca lo supiste.
Y fácil amar cuándo realmente lo sientes.
Por el simple hecho que amar nace,
Mi yo en ti.
Sin que me lo pidas
Sin que me lo digas
Está, en cada momento , existe.
Lo palpó
Lo vivo, contigo.
En cada uno de mis días,
Por tu existencia,
Tú en mi.
Por permitirme tu compañía
Por permitirte la mía.
Se qué luchas y sabes que lucho
Contra los miedos , los temores,
Contra las tristezas, las barreras.
Y te admiro,
Por tu fortaleza, por tu carácter,
Por tu personalidad.
El gesto de tus emociones,
El placer de contemplarte,
El paraíso de tenerte
La fortuna de ser tuyo.
Gracias y disculpas
Por qué amo cada día a tu ser.
Por qué amo cada día a nuestro ser.
Por qué aprendo y me enseñas , que el amor.
A diferencia del día anterior,
Es mucho más profundo y grande.
Y disculpas por colmarte las paciencias, y mi difícil comunicación.
El que seas tú, para mí.
El ser yo para ti.
Ha sido desde que mis palabras pronunciaron un : solamente tú.
Y desdé antes ya lo era.
"Soy quien te ha nombrado, para amarte, durante todos los días que avancen,
A quien mi alma cedo, a quien tu alma siente.
Y es curioso
Que me sientas tanto, que parecemos que somos
Que te siento tanto, que parece que eres.
La dueña de mi."
Te entrego, a mi yo, por qué se que eres.
El amor del libro
En el atardecer del campo.
