Parte 1

216 31 8
                                    

Jiang Cheng no pudo evitar soltar un suspiro de alivio una vez que sus ojos se posaron finalmente sobre el blanco edificio al que se suponía que debería de llegar. Las horas de insomnio debido al trabajo y del vuelo posterior le estaba empezando a pasar factura, a pesar de su resistencia de pasar hasta casi 4 días sin dormir debido a sus investigaciones, el tener que realizar un viaje de urgencia y luego todo el trayecto para llegar al lugar simplemente le permitió sentir el cansancio en sus huesos.

Nadie había dicho nunca lo placentero que era el simple hecho de extender las piernas luego de horas de permanecer sentado y no pudo evitar estirarse disimuladamente una vez que sus pies tocaron el asfalto frente al lugar.

Una joven de cabellos negros que le llegaba a la cintura, ojos verdes, piel clara y vestida con un vestido blanco que enmarcaba su figura se hallaba esperando para recibirlos en la puerta del establecimiento. Una vez estuvieron lo suficientemente cerca ella lo saludó con una ligera reverencia.

- Sea bienvenido Dr. Jiang. Hemos estado esperando su presencia con mucho anhelo.

Jiang Cheng correspondió la reverencia, pero sin mencionar palabra alguna. Esto ciertamente le había causado problemas en el pasado ya que no le gustaba hablar demasiado, sin embargo, la gente empezó a acostumbrarse al hecho de que el Dr. Simplemente no tenía palabras que decir y prefería mantenerse callado.

Avanzaron a través de los pasillos, con la joven mostrándole la instalación. Jiang Cheng asentía en respuesta a sus indicaciones, tratando de memorizar la estructura del lugar para luego evitar tener que pedir asistencia al momento de recorrerla. Eso en todo caso no sería algo difícil, a pesar de su mente cansada, cuando necesitaba revisar o memorizar alguna cosa para él no suponía reto, ya que como lo había visto lo recordaría. Su memoria fotográfica había sido elogiada demasiadas veces como para que se sienta cómodo.

Actualmente había sido contratado como consultor por una agencia asociada al gobierno chino que se dedicaba a investigar asuntos de carácter bastante confidencial, tales como hallazgos de estructuras y objetos raros, enfermedades y microorganismos improbables o inclusive personas con capacidades imposibles. Jiang Cheng era un genio en múltiples áreas, lo que lo hizo ser conocido mundialmente como el genio del milenio.

Según la información que había recibido cuando fue llamado para el trabajo, este edificio era un super complejo de laboratorios dedicados a múltiples áreas de investigación, poseía un ala de investigación médica, un ala de investigación respectiva a química, física, geología, etc.

A través de ventanas de vidrio que separaban los laboratorios del pasillo, Jiang Cheng podía observar a los profesionales trabajando, haciendo experimentos o discutiendo sus ideas.

Una vez recorrieron toda la instalación, una mujer joven usando una blanca bata se acercó a ellos, a lo que la señorita que lo había acompañado todo este tiempo se despidió y dejó a ambos doctores solos. La Dra. le indicó a su acompañante que la siguiera hasta un ascensor al final del pasillo y una vez que ingresaron al mismo la Dra. finalmente habló.

- Buenos días Dr. Jiang.

- Buenos días Dra. Wen.

- ¿Cómo estuvo el viaje?

- Largo como la mierda, no sé por qué construyeron este lugar tan lejos.

- Jajaja. Y yo que pensaba que el tiempo y la fama habrían cambiado tu actitud.

- La fama solo hizo que la gente tuviera más ganas de lamerme los zapatos.

- Ciertamente. No te ves mal para alguien que seguro no ha dormido durante 5 días.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 09, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

ElectrificanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora