¡El Pan!

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Marshall estaba qué estallaba de enojo, ¿¡Como podían hacer eso?! El no quería nada con Ash, el ya no quiera nada con quien más le hizo daño.

"Gum, ven a mi casa ahora por favor necesito explicarte algunas cosas"

Al mandar ese mensaje y ser leido, aquel chico pelirosa llego en una media hora debido a los fuertes climas qué se habían presentado.

—¡Marshall! — saludo sonriente, pero había algo que le cuestionaba a Marshall ¿gumball era más alto que el? Era raro, por que había veces que era más pequeño que el. —Gracias por invitarme— Dijo con una sonrisita y paso, Marshall vio para abajo y vio su secreto ¡plataformas! Eso era. Gumball era un tramposo bien hecho pero Marshall lo iba a perdonar, solo esta vez.

— ¿Pasa algo? — Se quito su abrigo debido al terrible frío que estaba pasando afuera, aquel chico de tez morena no podía dejar de ver aquella cintura perfecta ¡Era como si llevara un corset! Quería tomarlo, hacerlo suyo, pero no era muy vulgar pensar eso, más con el dulce de Gary qué no mataría ni una mosca, a quien le encanta cocinar — Quería explicarte acerca del mensaje, ella ya no es nada mio. — Gumball le miro con una sonrisa pero internamente estaba increíblemente agradecido qué Marshall estuviera soltero.

— Esta bien, confío en ti Marshall — Estaban tan malditamente cerca cada uno de aquellos lindos labios rositas, labios qué cualquier hombre o mujer querría besar. — ¿Sabes a chicle? — Pregunto Marshall sin más cosa que a Gumball le dio una pequeña risa mientras le miraba, Marshall se puso rojo y trato de excusarse o tratar de no verse nervioso cosa que gumball noto al instante.

—¿ Quieres probar? — Dijo mirándole con una pequeña sonrisa, así que lo acercó a él y lo empezó a besar con suavidad ¡Se estaban besando! ¡Besando!.

Marshall no lo podía creer, era un sueño un sueño que amaba por supuesto, lo tomo de aquella delgada cintura siguiendo con aquel beso se besaban tiernamente como si fueran una pareja de verdad.. Una pareja de verdad.

Después de unos minutos se separaron debido a la falta de aire en ese entonces la piel de Gumball enrojecio claramente —¡lo siento Marshall!— Dijo nervioso mientras se cubría su rostro, Marshall solo lo abrazo con una sonrisa mientras le daba un beso en su hombro, Gumball vio la ancha espalda de Marshall y sus lindos lunares en forma de mordida de vampiro ¿Se imaginan qué Marshall fuera un vampiro? ¡Sería épico!

— Quieres.. ¿Ver una película? — Dijo Marshall mirándole finalmente en donde Gumball asintió, cuando prepararon todo, Gumball se quito aquellas plataformas dando a conocer su tamaño real — ¿me puedes prestar ropa? Vine por que me preocupaba que te pusieras mal o estuvieras mal.. No para ver una película — Dijo riendo mientras aquel chico de cabello azabache le entregaba una ropa algo ancha, una cosa no dicha es que estaban en el cuarto de Marshall ¡qué cosas están pasando! — Si quieres me puedo..— Marshall se le quedó viendo mientras Gumball se quitaba la camisa que traía puesta dejando ver su torso desnudo y su ahora despeinado cabello, se puso la camisa dada cosa que le quedaba enorme, ahora se quitaba aquel pantalón dejando ver su lindo trasero bonito y formado según Marshall— ¿Decías algo Marshall? — Dijo mirándole con una inocente mirada ¡Lee se sentía un maldito pervertidos al intentar pensar aquellas cosas con el chico de rosa! — Creo que iré por las palomitas y los chocolates — Dijo con una sonrisa nerviosa mientras gumball se acercaba y acaricaba su mejilla, Marshall veía aquellas lindas y blancas piernas, pero solo pudo dar un asentimiento así para sonreír levememente y acostarse lentamente en la cama, Marshall estaba por Lanzarse hacia el y hacerle todo lo posible pero claro que no lo haría, claro que no. Al regresar Gumball estaba con el control en mano buscando alguna película ya qué Marshall le había dicho.

— ¿Podemos ver una pelicula de vampiros? — Dijo con una sonrisa tan pura. Marshall asintió y se acostó a su lado y apago las luces para ver aquellas películas, después de un rato era la una de la mañana cuando acaba su tercera película hasta sentir una suave respiración en su pecho ¡Gumball se había quedado dormido! Era adorable así que apago la tele y puso la basura en su lugar, tapó a su lindo chicle con gusto y abrazarlo.

En la mañana Marshall sentía una respiración en su pecho pero era muy cerca, cuando abrió los ojos vio que Gumball estaba metido en su camisa ¡Era adorable muy adorable! Así que el le tomo una foto sin que se diera cuenta, se dio cuenta de una cosa ¡Gumball hablaba dormido! — Marshall.. Te ves tan delicioso como un pan de chocolate.. —

¿¡QUE DIJO?!

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Perdón si es corto pero va a ver intensidad el próximo capítulo se los juro 💪