💀🔪. » 𝗛𝗲𝗹𝗹𝗼 𝗗𝗲𝗹𝗶𝗹𝗮𝗵, 𝘄𝗼𝘂𝗹𝗱 𝘆𝗼𝘂 𝗹𝗶𝗸𝗲 𝘁𝗼 𝗽𝗹𝗮𝘆 𝗮 𝗴𝗮𝗺𝗲?
𝐄𝐧 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 ghostface está de regreso en Woodsboro años después de los asesinatos cometidos por Jill Roberts y Charlie Walker
O
𝐄𝐧 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 vuelve...
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Delilah, Sam, Tara y Bailey corrían apresurados hacia la salida del parque. Delilah no paraba de llamarle a Gale, pero ésta no le contestaba
—¡Mierda! —exclamó Delilah cuando Gale no contestó su quinta llamada
—Amor, Danny ya va para allá —le dijo Sam en un intento de tranquilizarla
—¿Quién es Danny? —preguntó Bailey, trotando detrás de ellas
—Un amigo, trabaja en el Upper West Side, llegará antes que nosotras —le contestó Sam
—O puede matarla —dijo Bailey — ¿Es posible que el sea el asesino?
—Mierda —dijo Sam
—Tenemos que llegar ya — dijo Delilah y luego dejó salir una maldición al no recibir de nuevo una respuesta por parte de Gale
—Está a cincuenta calles, puede que no sea cierto —dijo Bailey — ¡Chicas, esperen!—exclamó al ver que ninguna tenía intension de parar
—No podemos esperar —le dijo Sam
—Sam tienes que confiar en mi, hay que decidir lo correcto
—¡Él ya está en...
—¡Sam! —Delilah y Tara le gritaron, ambas chicas se encontraban en la patrulla de Bailey
—Sube —le dijo Delilah, la cual se encontraba en el volante
—¿Qué hacen?— susurró Bailey — ¡Oigan... bájense de mi coche! —Sam abrió la puerta del copiloto y se montó en el auto, ignorando los gritos de Bailey— ¿Qué les pasa? ¡Es una patrulla!
Sam lo ignoró y comenzó a subir la ventanilla
—¿Usamos la sirena? —miró a su novia
—¿Robaremos una patrulla y no la usaremos? —contestó Tara desde los asientos traseros, Delilah rió y presionó el botón que encendía la sirena
—¿Al menos tienes licencia? —gritó Bailey desde la acera
—No— susurró Delilah —pero no tienes porque saberlo —pisó el acelerador
—¡Li, nos vas a matar! —gritó la menor al ver que Delilah se pasaba un semáforo, ocasionando que varios autos tocaran su claxon —¡No estamos en una maldita película de rápidos y furiosos! — le gritó al ver que se metía entre los autos
—¡Dame eso! —le gritó Sam al ver que Delilah había tomado su celular
—¡LILA CUIDADO! —gritó Tara al ver que una anciana cruzaba la calle
—Se tiene que quitar, ni modo que se deje atropellar —le contestó levantando los hombros — maldita viejita de mierda — exclamó cuando la anciana no se movía de la calle, comenzó a tocar el claxon para que se moviera más rápido pero la pobre anciana apenas y podía con su alma
