(Lo del sida fue broma, no me maten)*
Finn: -Debo mostrarte algo.
Rachel: -¿Tienes un hijo aparte?
Finn: -¡No!
Rachel: -Entonces ¿Qué?
Finn: -Acompáñame- me tomó de la mano y caminamos, hasta que llegamos
Rachel: -¿Qué es esto?
Finn: -Es un castillo inglés.
Rachel: -¿Por qué me trajiste aquí?
Finn: -Está vacío, lo rente para nosotros.
Rachel: -Pero... ¿Y la fiesta?
Finn: -La fiesta la haremos tú y yo aquí solos.
Rachel: -Wow, ya vas aprendiendo a ser desocupado.
Finn: -No lo creo, estaremos muy ocupados ahora.
Me tomó de la mano y me dirigió hasta adentro.
Rachel: -Wow- suspiré.
Finn me tomó de la cintura por la espalda y apartó mi cabello, me empezó a besar suavemente en el cuello, mi piel se erizó, me levantó y sacó los tacones de mis pies. Desabrochó uno por uno con lentitud los botones de mi vestido y lo dejó caer en el suelo, yo me volteé para desprender con suavidad su chaqueta y su corbata, se miraba perfecto con esmoquin, pero juraba que me miraría mejor sin él, desabroché su camisa mientras él me daba dulces besos en el oído, desabroché su pantalón y lo dejé caer, él me tomó de la cintura y me recostó sobre la cama. Me miró con sus ojos verdes profundos como siempre lo hacía antes de comenzar.
Finn: -Te amo, mi hermosa esposa- susurró. El movimiento suave de sus labios al pronunciar esas palabras me hizo estremecer y por un segundo pensé que estaba soñando.
Rachel: -Y yo a ti- uní mis labios con los suyos y comenzamos a frotar nuestras pieles con suavidad, nuestro calor se juntaba y hacía más cálido este encuentro. Terminamos de deshacernos de toda nuestra ropa. Besamos cada centímetro de nuestro cuerpo, Finn acariciaba mis piernas con suavidad mientras se adentraba a mí con intensidad, besaba mis pechos y me llevaba a la cumbre del placer, todo era perfecto hasta que...mi teléfono sonó.
Finn: -Ni se te ocurra contestar.
Rachel: -Sólo déjame ver quién es.
Finn: -No importa quien sea, estamos aquí sólo tú y yo.
Rachel: -Por si no recuerdas ya no sólo somos sólo nosotros dos, hay dos personitas más también.
Finn: -Tu madre los está cuidando con Denise, disfrutemos de nosotros- el teléfono dejó de sonar.
Rachel: -Entonces imagino que quieres disfrutar algo- lo recosté y comencé a besar cada centímetro de su cuerpo, el teléfono volvió a sonar. Finn lo tomó mientras yo seguía en mi labor.
Finn: -¿Hola?- dijo en un gemido- ¡Suegra!- me detuve.
Rachel: -¿Qué pasó?
Finn: -Habla tú, a mí me da miedo- me dio el teléfono.
Rachel: -Mamá ¿Qué pasa? ¿Barbra y Jesse están bien?
Shelby: -Sí, ellos están bien...el único problema es que esta es una celebración de bodas y ¡No está ninguno de los que se casaron!
Rachel: -¿Qué? ¿Dónde está Quinn y Puck?
Shelby: -¡No lo sé! No se han aparecido aquí igual que ustedes, debes venir ya o tu hija matará a su hermano.
Rachel: -¿Qué le está haciendo?
Shelby: -No deja que Jesse toque a Beth y lo va a matar ¡Ven de una vez!
Rachel: -Vamos para allá- colgué.
Finn: -¿Qué le paso a los gemelos?
Rachel: -Nada, pero Puck y Quinn tampoco aparecen, los muy cerdos andan fajando y dejaron a su hija tirada.
Finn: -Cállate que eso hicimos nosotros.
Rachel: -Barbra y Jesse se están matando por Beth, debemos irnos.
Finn: -Está bien- dijo sin ánimos.
Nos vestimos y regresamos a la iglesia, tomamos el coche y llegamos a la mansión. Justo entraban Puck y Quinn.
Quinn: -Te dije que andaban haciendo lo mismo, me debes diez dólares.
Puck: -Pero si yo estaba de acuerdo que estaban haciendo lo mismo.
Rachel: -Que horror ustedes no se componen.
Finn: -Mira quien habla.
Todos aplaudieron al vernos llegar. Jesse se lanzó a nosotros llorando.
Finn: -¿Qué te pasó, amor?
Jesse: -¡Barbra!- dijo entre llanto.
Finn: -¡Barbra!
Barbra: -No no no- dijo meneando su dedo.
Finn: -¡Castigada!
Beth: -Jesse.
Barbra: -¡No! ¡Jesse no!
Quinn: -Barbra, deja que Beth esté con Jesse.
Puck: -¡No!- tomó a Beth.
Quinn: -Te pasas de ridículo.
Santana: -¿Vamos a celebrar o qué?
La celebración comenzó y terminó, todos borrachos excepto los niños claro, aunque encontré a Barbra tratando de abrir una botella mientras Jesse le daba una flor a Beth, Barbra al ver aquello lanzó la botella al piso enojada y tuvimos que llevarlos al hospital para asegurarnos que estuvieran bien y ningún vidrio los haya alcanzado.
Finn y yo regresamos a nuestra casa donde vivimos entre peleas y reconciliaciones, Quinn y Puck llegaban a estar con nosotros, salíamos y disfrutábamos todos juntos.
Nuestros hijos crecieron, con forme al tiempo Barbra iba compartiendo más a Jesse, quien siempre vivió pendiente de Beth, Barbra se burlaba bastante de ellos, Beth era un amor, pero el único problema es que su mejor amiga era mi hija, que a pesar que no sufrió trastornos en la escuela tenía un carácter fuerte y dominante, Jesse llegó a ser exactamente como su padre, firme pero tierno. Nunca olvidaré que a los 16 años conocí al amor de mi vida por haberme portado tan mal y que todo lo que hice fue a él a quien me llevó. Que cometí muchos errores, que no debemos pasar sobre los sentimientos de los demás para conseguir lo que queremos, pues si algo es para nosotros debemos luchar a toda costa pero con paciencia y perseverancia, pues no hay and amalo en luchar y tener carácter pero para que encapricharnos con algo que no necesitamos y cerrarnos en nuestras ideas si hay un mundo alrededor esperando a mostrarnos muchas cosas más que no conocemos y que tal vez sean mejor vivirlas a otra manera, que todo lo que haces se te regresa y que si no te arrepientes y lo enmiendas a tiempo....puede llegarte a costar muy caro y no podrá haber marcha atrás.
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BAD GIRL (adaptada-finchel) terminada<3
FanfictionNarra Rachel: Las fiestas, la ropa, los chicos, la fama, el dinero, la posición social y todos los demás placeres de los que puedo gozar. A mis cortos 16 años he vivido muchas cosas, nada malas por suerte. Padres millonarios y viviendo la vida que m...