Al principio Riven pensó que seria un fastidio enseñarle a alguien a usar una espada pero que por 20 dólares lo valía. Para su sorpresa Yasuo entendía rápido y progresaba a un buen ritmo.
Eso era bueno, lamentablemente no era así con todo lo demás, las clases eran algo confusas por el mal manejo del idioma y tenia un bajo rendimiento en las pruebas a excepción de lo físico.
Que fastidio pensó ella, mientras recostaba su frente en su casillero y bajaba la vista para ver un cuadernillo marrón que traía en sus manos.
A simple vista, solo se veía un montón de garabatos que intentaban formar algo y fracasaban en el intento. Riven se propuso corregir eso, trazando línea tras línea. Se concentró por completo en su tarea, desconectándose momentáneamente de la realidad para dar forma a la imagen que tenía en su mente.
Hasta que fue sorprendida abruptamente.
Yasuo: (llegando por la espalda) Hey Riven ¿Qué haces?
Riven: ¡AHHHHH! /Dio un pequeño salto/ ¡Puta madre Yasuo! ¡No te me acerques así!
Yasuo: Umm perdón.
Riven: No te disculpes.
Yasuo: ¿Eso que traes en la mano es un cuadernillo de dibujo?
Riven: ¡NO! /Guardo todo en su casillero de mala manera/ y nunca lo será.
Yasuo: Mmm deacuerdo pero tranquilízate.
Riven: Estoy tranquila.
Yasuo: [Pues no me gustaría ver como eres cuando estas enojada]
Riven: ¿Sucede algo o a que viniste?
Yasuo: Si viene por algo pero se me acaba de olvidar, me desconcentraste.
Riven: Ay pues lo siento mucho /dijo con sarcasmo/
La conversación siguió por un tiempo, de alguna forma lograron extenderla y hacerla interesante para ambos hablando mal de los profesores.
Pues si bien algunos eran buenos, muchos otros tenían claro favoritismo por lo que consideraban sus alumnos estrellas y dejaban a los demás de lado.
Y claro, ninguno de esos profesores tenia la paciencia para esperar que Riven comprenda la clase o termine de traducirla por completo.
Por otro lado Yasuo si era bueno en la escuela pero no era el favorito de nadie, caso contrario con Seraphine. Que curiosamente, cuando mencionaron su nombre Riven comenzó a sentir una sensación de peligro en el cuerpo.
Riven: Yasuo....¿tu confías en mi?
Yasuo: Ammm, no entiendo a que viene la pregunta, ¿Quieres que te ayude a esconder un cuerpo o algo así?
Riven: Solo responde la pregunta.
Yasuo: Si, supongo que si.
Riven: Entonces confía en que esto es por tu bien.
Riven agarro con fuerza a Yasuo y sin dar explicaciones previas lo metió a su casillero como si se tratara de un bullying en las películas americanas.
Riven: (Inhala profundamente) Lo siento....
Uno, dos y tres, pudo escuchar con claridad cada paso, acompañados por ese inconfundible sonido de tacones acercándose. Ya estaba anticipando la llegada de esa voz irritante y esa sonrisa cuando pronunció la primera palabra.
Seraphine: ¿Con quien hablas forastera?
Riven: Con nadie, solo estaba pensando en algo.
Seraphine: ¿Pensando en algo? Mejor deberías estar estudiando, tus notas son terribles pero claro, alguien como tu no ah de saber ni como leer.
