—Hola, me llamo Milvida
—Siempre es un placer un placer conocer a alguien con tal belleza— dice el con una sonrisa socarrona surcandole el rostro
—Gracias
—Oye te gustaría salir este fin de semana con migo ?—dijo esbozando una sonrisa que dejaba ver sus perfectos dientes además de un tierno hoyuelo que se marcaba en su mejilla.
—Claro. — se sorprendió a si misma al responder sin titubear, pero lo disimulo muy bien, para que el no se diera cuenta y creyera que se sorprende de que el la haya invitado a salir, aunque era cierto, pero es mejor que el no lo supiera.
—Ok entonces te veo el viernes a las 3.— Ella solo se limito a asentir, con miedo a quedar en ridículo, ella estaba segura que no le gustaba y estaba dispuesta a probarlo aceptando la cita, no es que ella le acabara de conocer como tal, en realidad llevaba dos años conociéndole, aunque nunca se hubieran presentado formalmente, le conocía y eso era lo que importaba.
Se despidieron y cada quien se fue por su lado. Milvida se fue a su clase y al llegar Emma la bombardeo a preguntas.
—¿Por que tardaste tanto?, ¿Te perdiste o algo así? O ¿Encontraste la cámara de los secretos?—Le pregunta Emma, perdiendo el hilo de la conversación —Si es así tienes que enseñarmela.— Demandó
Milvida ignoro el montón de preguntas y prosiguió a hablar —A que no adivinas lo que me pasó cuando venia— Le dijo sonriendo emocionada.
—¿Que? No se, no soy bruja.—sonrió.— Aunque por tu expresión puedo deducir que es algo muy interesante, ¿o me equivoco?
—No, tienes razón si es algo medianamente interesante— hizo una pausa dramática, a lo que Emma le respondió con una seña para que continuara — Choque en el pasillo con Thomas
—¿El playboy?— la miró confundida, que se encontrara cara a cara con el playboy del insti era interasante , pero eso no explicaba la palpable emoción que soltaba su mejor amiga.
—SIII— Soltó un gritillo de emoción.
—¿Y que pasó?— La instó, para saber que paso.
—Me invito a salir— Soltó de una vez, dejando a Emma confundida
—Y que le dijiste? .¿ Aceptaste?. —Le pregunto para satisfacer su curiosidad
—Si acepte salir con el— Dijo Milvida expectante a la reacción de su amiga
—Pero no puedes caer en sus redes— le dice expresando su preocupación ante la situación
—Tranquila solo acepte para probar algo— Dice para despreocupados, y además Emma ya debía de estar suponiendo que quería probar, ya que el astibo de una sonrisa comenzaba a asomarse por su rostro.
—Oh bueno y cuando es?— Le preguntó divertida, ya sin ningún rastro de preocupación, pues de antemano sabia lo que tramaba su amiga.
—El Viernes
—Suerte entonces, aunque debes tener cuidado no le dicen playboy por nada— Dijo esto último tratando de sonar como una mama que aconseja a su hija. Se vieron la cara unos segundos y luego estallaron en carcajadas.
Acabó la clase y fueron a reunirse con los demás chicos.
En el camino le llega un mensaje a Milvida, sacó su teléfono del bolsillo y encendió la pantalla, una expresión de confusión pasó por su rostro al notar que era de un número desconocido y también por el contenido del texto.
"Hola belleza"
Se preguntó quien podría ser el remitente de ese mensaje, podría ser solo una broma o incluso podría ser el chico misterioso de los chocolates, así que para salir de dudas le contestó.
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Los Acosadores de Milvida
Novela Juvenil¿Que harías si de repente todos los chicos guapos del instituto se comienzan a interesar en ti? Milvida es una adolescente que lleva aparentemente una vida normal, hasta que aparecieron ellos, si ellos!!! sus acosadores. Todos ellos en una competen...