MAFIA

Capitulo 3:

Crepúsculo

Después de todo el parkour era el deporte favorito de mis hermanos por ende, yo igual lo practicaba, era eso o clases de japones. Si tocaba, tocaba...

Tome la delantera. Empecé a correr con todas mis fuerzas, algo torpe, mi pierna me hace hacer las cosas peor de lo que lo haría normalmente por lo cansada que estoy, pero no puedo rendirme, no ahora que estoy apunto de  de ser libre, los hombres se estaban acercando demasiado rápido, casi me faltaban unos cuantos pasos, uno de los hombres empezó a disparar con su AK47 cromada, tuve que tirarme al suelo, detrás de lo que serian jarrones gigantes, deslizarme con cuidado, gracias al cielo que pude entrar, de un movimiento desesperado cerré la puerta golpeando así, la cara de uno de los hombres que intento entrar con rapidez, busque algo con que poder sellar la puerta, pase el seguro y me dirigí al piano que estaba viendo en dirección la ventana, con la poca fuerza que tenia empecé a empujar el piano hasta la puerta para estar un poco más tranquila y poder descansar unos minutos.

Reposé unos 10 minutos, la verdad se sintió la gloria, mi cuerpo se recupero un poco, pero aun así no serviría de mucha ayuda, en unos minutos volvería a la acción, tendría que salir, deje de escuchar ruido detrás de la puerta, eso quería decir que estaban tramando algo para capturarme de nuevo, me levanto de golpe, sin importar mis heridas, me acerco lo suficiente a la ventana para ver a que altura me encontraba pero me di cuenta que no podía bajar. Habían muchos perros de caza allí abajo y al pisar el suelo seria comida para canes.

Mi mejor arma ahora era seguir subiendo hasta llegar al tejado, así podré ver mejor el lugar, tengo que conseguir un arma para cuando mi cuerpo no pueda más, una vez ya terminado mi plan empece a escalar por los muros  de decoración y rejas del lugar, se me hacia un poco imposible dada mi situación... Pero lo lograría, tome  una bocanada de aire antes de subir el ultimo escalón, pero sin darme cuenta un clavo me rasgo profundamente el brazo haciendo un gruñido de dolor, mi piel se desgarro brutalmente, la sangre brotaba de mi como si se trataba de un globo de agua roto.

Al poder llegar al tejado destrocé mi camiseta para poder hacerme un torniquete en aquella herida y tratar de detener la hemorragia, con fuerza trato de apretar mi torniquete y la verdad es que funciona, la sangre dejo de fluir.

Recuesto mi cabeza sobre la dura teja del techo, mi cuerpo descansa unos segundos mientras disfruto  del aire fresco y del sol golpeándome la cara, el cielo esta precioso, anaranjado, rosa, azul, morado... De unos crepúsculos hermosos, deben de ser como las 5 o 6 de la tarde más o menos, después de más de tres días secuestrada sin ver el mundo exterior y sin sentir la brisa fresca, hace que este momento sea delicioso y exquisito, siento como cada poro de mi piel disfruta de esto, como si no hubiera nada mejor en el mundo, pero este hermoso momento se acaban cuando escucho una voz gritar:

"¡Allá esta!"

(La madre que lo parió) Me levanto lo más rápido que pude y empiezo a correr, sin importarme nada (Aquí vamos de nuevo)

Al llegar a lo ultimo del tejado no pude evitar parar y pensar "¿Que haré ahora?" Empiezo a ver el ligar y donde podría aterrizar en caso de que salte, aunque era la única forma de ser libre, no tan lejos del tejado se encontraba una gigante rama  de un árbol y abajo de su sombra se encontraba un auto, este es mi boleto de salida y de libertad, pero... ¿Ahora que haría? MI única familia estaba muerta, mis hermanos... Habían muerto , mi hogar estaba destruido, el impacto de un proyectil contra mi cuerpo (Parte inferior de mi brazo izquierdo) me saca de mis pensamientos haciéndome seguir mi instinto y mi plan para escapar, el dolor era intenso, pero ya estaba acostumbrada a esto.

sin pensarlo tomo algo de impulso y salto, el doloroso golpe que me recibió cuando impacté contra el árbol, fue lo ultimo que pudo aguantar mi cuerpo moribundo, ya no podía más, escuche todos y cada uno de mis huesos quebrarse, con cada impacto contra las ramas, y ahí fue todo, me preparé para mi final, supongo que ya estaba bueno, ya había dado pelea, ya había logrado liberarme, estaba todo bien, el sol se colaba por las hojas del gran y hermoso árbol, pude apreciar una vez más el sol tocando mi piel, como me abrazaba y me daba paz. Supe que ya era momento de estar con mi familia, el suelo fue lo único que sentí después de cerrar mis ojitos y pensar en lo feliz que fui con mis seres amados, primera vez que falle un tiro, después de haber practicado muchísimo, mis hermanos me dieron ánimos, me ayudaron, me apoyaron, nunca me dijeron cosas feas, nunca los decepcione, cuando por fin lo logré me compraron un pastel y celebramos, esa vez tan solo tenia 6 años, mi infancia tal vez no fue la más normal, como otros niños que salían a jugar carrito o niñas con barbies, yo jugaba con cuchillos... Etc Mi primer asesinato que vi fue a los 4 años en un reality show de documentales de asesinos en serie y me maraville, mis hermanos me empezaron a enseñar lo que ya habían aprendido con su padre adoptivo "Alfred", como mutilar, desmembrar y por su puesto el negocio familiar, las drogas, por eso mis hermanos eran exitosos en lo que hacían. Cuando tuve mi primer corazón roto mis hermanos me ayudaron a sanar, a olvidar, pero se vengaron del hijo de puta, que me lastimo , tan solo tenia 14 años, desde entonces todos los chicos que se me han acercado, ellos los espantaban , siempre me cuidaron de todo mal.

Al salir de la preparatoria mis hermanos hicieron una fiesta enorme, solo para mi, nunca fracase en nada, gracias a ellos, nunca me falto nada, siempre fui la mejor en todo gracias a ellos y estar en un plano terrenal sin ellos, es resignarme que jamás los tendré de vuelta. Todos los hermosos, graciosos y vergonzosos recuerdos llegaron uno tras otro a mi mente, fui feliz por ultima vez...

Al impactar por ultima vez mi cuerpo, después de caer por más de 6 pisos a bajo. deje de pensar, deje de sentir, deje de caer, deje de respirar y solo esperaba estar de vuelta con ellos...