¨Fire meet Gasoline¨//°Shawn Mendes

Cap 2

Sin dudar dos veces tome la mano de mi hermana y salte de este muro, camine un poco, lo perdimos, no lo veíamos por ninguna parte, esto es algo como típico, pero esta vez lo sentía diferente, sentía que perseguía un futuro, algo relacionado al amor, de mis pensamientos me saco mi alarma con ese odioso tono típico de Alarma de iPhone. Eran las 18:50, tiempo de tomar mis pastillas.

Cassie: Mandy.... ya van a ser las 7pm o wow que rápido se pasó el tiempo bueno hora de tomar tus pastillas.

-No son necesarias.

Cassie: Por favor solo tómalas no te quiero volver a ver en la clínica teniéndote que donar sangre.

-Está bien- tome estas capsulas celestes, es increíble como un químico te puede hacer feliz, me lo pregunto día a día pero lo más raro es que si funcionan, las tome de un sorbo, ya era toda una experta que no necesita agua.

Seguimos caminando en cuanto vimos a este chico y nos escondimos contra la pared, lo observe con cautela, no se le veía muy bien de lejos, porque la espalda de su amigo lo tapaba, no podía parar de sonreír y reír con mi hermana mientras nos susurrábamos ¨es demasiado churro¨ o cosas como ¨me como a los dos¨ ustedes entienden cosas estúpidas típicas de hermanas.

Vimos que nos notaron y rieron, me separe un poco de mi hermana debido a que no podía parar de reír y parecía completamente una loca, en unos segundos me tropecé con un balde pequeño que de seguro algún niño estúpido había dejado en la tarde, estaba a 30 centímetros de la piscina y en un abrir y cerrar de ojos caí en esta por la zona más profunda.

Mientras estaba abajo recordé ese día, me quede debajo del agua, no quería salir, la otra cosa es que no podía salir no sé nadar, se sentía tan relajante, se me empezó a acabar el oxígeno, en cuanto sentí unos brazos cogerme de la cintura, me jalaron hacia arribe y cuando sentí el frio viento chocar mi cara abrí los ojos escupiendo el agua que se había metido a mis pulmones, se podría decir que por una parte quería que me sacar y por otra no.

Estas bien...- Sentí una voz y subí la mirada, era el chico, pude ver sus ojos pero algo extraño fue que sentí los míos con mucho amor pero los de él eran secos, no tenían ni una expresión de amor ni nada, pero su cara se me hace tan conocida.

-Si gracias- dije tosiendo.

Él se paró y vi a su amigo sorprendido, me dio una toalla y se fue, se fue empapado del agua de la piscina, no vi nada en sus ojos, no vi ningún sentimiento, pero porque se tiro a la piscina, tal vez intentaba de ser el héroe o mi hermana se lo pidió, no lose, este chico es misterioso.

Nos quedamos sentadas en la poltrona unos segundos en cuanto vimos a una mujer muy elegante acercarse hacia nosotros, de lejos no parecía mi madre, pero cuando se acercó, la pesadilla había empezado.