¡¡¿YO SOY MAY?!!

Cap 2: Concursos Pokémon.

Volví a casa para el almuerzo junto a Taillow, no se quiso despegar de mí, me contó que se separó de su familia conocer el mundo, la casa de May fue su primera parada, quería saber si los humanos en verdad eran seres horribles que le negarían la comida, se llevó una gran sorpresa al ser invitado por mi a comer en su casa.

- Me caes bien humana.-Dijo y entramos a la casa.

-Me alegra escuchar eso.- Dije dándole mimos.

Ahora que los pienso, no he visto el gimnasio del señor Norman, no sería mala idea echar una miradita.

Agarré unas galletas en forma de pokebolas y le dí una a Taillow, quien aceptó con gusto. No fue difícil buscar el gimnasio ya que está frente a casa. La casa en si tiene dos entradas, una dónde te lleva afuera sin tener que ver el gimnasio y la otra te lleva directamente al gimnasio.

Al llegar entre de forma sigilosa y ví al señor Norman alimentar a su Pokémon más fuerte, tengo entendido que él entrena Pokémon de tipo normal, tiene en total tres, que son un Slakoth, su siguiente evolutiva Vigoroth y por último su evolución adulta Slaking.

Todos interpretando a un perezoso mutante que solo piensa en dormir.

-Hola....¿Puedo pasar?-Pregunté estando en la puerta del gimnasio.

El señor se sorprendió al verme, sin embargo me sonrió de forma relajada y me invitó a pasar. Caminé hasta él y saludé a sus Pokemones.

-Hola hijita mía, hola Taillow.- Saludó y también acarició al pequeño pajarito.-Juraría que fue un sueño, pero al verte con Taillow supe enseguida de no lo era.-Comentó.-Me alegra que ahora te gusten los Pokemones hija mía, me llenas de orgullo.-Dijo como todo padre orgulloso por su hija en lograr algo que creía imposible.

Reí bajito y miré a los Pokemones que tiene alimentándolos.

-Hola.-Saludé de forma casual.

-¿Podrías ayudarme a alimentar a tus hermanos mayores en lo que vuelvo?-Pregunta refiriéndose a sus Pokemones.

Asentí con la cabeza y lo miré marcharse hacia la parte trasera del gimnasio.

- No sabía que tenías hermanos Pokemones. -Habló Taillow mirando a los tres Pokemones tipo normal.

- No somos sus hermanos, solo que el señor Norman nos trata como sus hijos. -Explicó brevemente Slakoth mientras traga su comida.- Lo cuál para nosotros es...normal.-Bosteza y me saluda.

- Me alegra saber que papá no los trata como máquinas de pelea.-Dije tranquila.-¿No les molesta si les llamo hermanos?-Pregunté con una sonrisa inocente.

Ahora solo debo esperar a que se den cuenta de que los puedo entender. Lo cual no pasó mucho, ya enseguida Slakoth, Vigoroth y Slaking abrieron los ojos como platos.

- ¿Puedes hablar nuestro idioma? -Hablaron los tres al mismo tiempo.

- Sorpresa.-Reí y me agaché a la altura de Slakoth, le acaricié su cabeza de forma dulce.

Al igual que Taillow se sonrojó por la muestra de cariño, le sonreí y los miré de forma dulce.

- Entonces si es cierto lo que dijo nuestro "padre".- Habló Vigoroth mirando a mi compañero en mi hombro.- Nuestra "hermana" por fin superó su miedo a nosotros.-Comentó calmando su estado de shock o eso parece.

Me senté en el piso y Taillow se posó en la cabeza del pequeño perezoso, creo que se llevarán bien.

- La noticia se esparció todo Hoenn.-Comenté y Vigoroth se me acercó hasta quedar frente a mí.