¿algodón de azúcar?

2:¿Que paso anoche?

Nueva mañana, nuevo día, nuevas cosas que hacer, sus clases por este día serían en la tarde y no se preocupaba, después de todo eran las 08:50 a.m, todo iba tranquilo, mantuvo los ojos cerrados y cuando los abrió tapo sus ojos con sorpresa, miro su cuerpo. . ¿En verdad lo había hecho con Souya Kawata?

Atino a sobarse la nuca, todos los recuerdos vinieron a su mente, recordó todo de inmediato, que vergüenza sentía en ese momento, tapo su cara con sus propios manos.

¿Y que paso esa noche?

Bueno. . .

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—Sou-chan, me gustas mucho—el efecto del alcohol estaba muy notable, abrazando la cintura del menor de los gemelos Kawata mientras acunaba la cara en el pecho del mismo.

El gemelo peli-turquesa solo se sonrojó más de lo que ya estaba(que cosas tan fuertes se tomó esa noche), con temblores en sus manos agarró el mentón del Haitani y plantó un beso bastante apasionado, el alcohol que ambos consumieron era tan fuerte que al momento de separse Rindou tenía una enorme y dolorosa erección, Souya se estaba calentando lentamente, después de todo era su primera vez.

—tu también me gustas muchísimo Rindou—susurro contra los labios del bicolor que apretó su cintura uniendose nuevamente en en abrazó tierno y un beso apasionado.

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Después de esos besos, recuerda cada acción, cómo ambos se abrazaban, cada ruido, cada uno de esos ruidos, el chocar de sus pieles, los gemidos, jadeos, absolutamente todo, incluso el momento en que el menor se colgó a su cuerpo para subir a su habitación.

—no puedo creerlo—solto un suspiro bastante pesado, agotado, feliz—me confesé y cogí con mí crush la misma noche—sonrio con triunfo— y el corresponde a mis sentimientos. . . gracias chicos. . .

¿Agradecer por qué? Por qué sin esos idiotas jamás habría abrazo al Souya ni se le hubiera confesado.

—Rin. . ¿Que hora es?—asi que si recordaba lo de anoche, eso solo lo emocionaba más, se sentía increíblemente feliz

Así comenzó un nuevo día para ambos, está vez juntos como siempre lo quisieron, en el momento de levantarse ambos sintieron unos pequeños dolores, Souya en prácticamente todo su cuerpo y Rindou en su espaldas, decidieron quedarse un rato más en la cama del Haitani para relajar un poco sus cuerpos y así no tener tanto dolor.

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—asi que pasaron la noche juntos—dijo con un tono burlesco cierto chico peli-rosa de ojos verdes y cicatrices a los costados de los labios, recientemente se había enterado de lo que paso entre el menor de lo Kawata y el menor de los Haitani, si era notable que se tenían ganas pero a su parecer habían tardado mucho—tardaron mucho en darse cuenta—pronuncio mientras bebía un café ofrecido por el mayor de los Haitani—tu deberías darte por vencido con Smiley, Ran.

En ese momento lo menos creíble de contar y creer sucedió ante sus oídos, esa voz que según el era completamente insoportable y ruidosa se escucho en la cocina y comedor, Nahoya Kawata se poso en la puerta de esas partes de la casa dejando a un Sanzu muy sorprendido y un Ran con cara de idiota enamorado, lo normal según Kakucho e Izana que se hacían presentes en el lugar.

Algunas veces todos se reunían para desayunar en la casa de alguien,y con todos me refiero a que absolutamente todos están ahí.

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—¿Pero que perro te atacó Rindou?—pregunto entre burlas Shion mirando las marcas visibles que había dejado Souya en Rindou.

—al parecer no fue muy doloroso—atribuyo a la broma Kokonoi, no le sentaba mal molestar un poco al Haitani, sería divertido, o así hubiera sido si no hubiera olvidado que Seishu, su pareja, estaba ahí, y sentado junto a el